Tom Araya, líder de Slayer, ha atendido a la gente de MTV.com, a los que ha explicado que debido a la operación a la que se tuvo que someter en la vesícula biliar, su banda tuvo que postponer el inicio de su próxima gira norteamericana.

«Mi médico quiere que me lo tome con calma,» cuenta el cantante y bajista. «Me dijo que no hiciera estupideces. Nada de levantar cosas…No podría levantar nada más pesado de 3 kilos la primera semana (tras la operación) y vas aumentando 3 kilos por semana. Así que para cuando salgamos a la carretera seré capaz de coger mi bajo.»

Explica Araya que se había pasado las últimas semanas yendo y viniendo de Texas a Los Angeles para grabar el nuevo disco de su banda. El último viaje no le sentó bien al bajista que casi sin darse cuenta se encontró «en una habitación en urgencias con un intenso dolor» y con un médico que le hizo saber que de no operarse, iba a tener un verano complicado.

«Es una condición que se va desarrollando lentamente, es genético. Toda mi familia ha tenido problemas relacionados con la vesícula biliar. La mayor parte de mi juventud la pasé bebiendo, sexo, drogas y rock and roll. He cambiado una gran parte de mi vida. Dejé de hacer esa mierda…Hace 12 años. Así que eso me hizo que aguantara más de lo normal.

Se supone que la vesícula biliar es una membrana muy fina y la mía tenía un grosor de 2,5 cm. Así que, obviamente, me he hecho un gran daño durante estos años. Y si no me tomo el tiempo para curarme, podría tener otras complicaciones, y quedaría jodido para el resto de mi vida, lidiando con estas complicaciones.«