Cornell: «No formamos Soundgarden para ser una banda llena-estadios»

Patrick Douglas de CultureShock.com ha charlado con Chris Cornell sobre como le está yendo la gira de presentación de su nuevo disco, «Carry On«, ahora que hace más de un mes que fue publicado.

«Creo que esto va más allá de la idea de un álbum en solitario, no es un álbum en solitario. Ni tampoco es una gira en solitario. La primera vez que hice esto fue con 'Euphoria Morning' y me centré en las canciones de ese disco y otras cosas que eran exclusivamente en solitario y creo que hice una o dos canciones de Soundgarden, no me acuerdo bien pero creo que así era. Ahora como que hago cualquier cosa de cualquier parte de mi carrera que sienta que me gusta. De cualquier momento. Da una sensación más definitiva. Da la impresión de que ahora estoy haciendo una carrera en solitario más que no una gira en solitario o un disco en solitario. Cuando Soundgarden nos separamos pensé que lo mío iba a ser una carrera en solitario. No pensé que volviese a estar en una banda. No le veía el sentido. No quería pero entonces, el hecho de tener aquella experiencia con Temple Of The Dog fue tan genial y natural y ver tocar a Rage Against The Machine, la combinación de esos dos incidentes hizo que sucediera lo de Audioslave porque pensé, 'No me voy a cerrar en banda a una colaboración que podría molar'. Pensé que podía molar y acabó siendo genial. Pero de alguna manera me puse un freno al inicio de una carrera en solitario y me volvió a dejar en la misma posición. Fue como, 'Muy bien, he dejado esta banda y voy a sacar otro disco en solitario' pero es como si aún no tuviera esa carrera en solitario. Sigue siendo algo que hago de vez en cuando. Al estar en la carretera es cuando ya empiezas a sentir más eso de 'Vale, ahora lo estoy haciendo'. Especialmente al tocar todas esas canciones de diferentes puntos de mi carrera. Esta es la primera vez en mi carrera en que estoy totalmente satisfecho con mis actuaciones en vivo, como persona que participa en ellas. Llego a canta en tantos campos distintos y con tantos tipos de música distinta y lo encaro haciendo versiones exageradas de 'Jesus Christ Pose' o simplemente estando ahí con la guitarra acústica y haciendo cinco canciones seguidas, tocando lo que se me viene a la cabeza en ese momento, lo cual es genial.

Esta es la primera vez en mi carrera en que estoy totalmente satisfecho con mis actuaciones en vivo.

Pienso que para mi todo se resume en tener una carrera o no tenerla. Para empezar a hacer discos, lo que empezó en Sub Pop, alguien me dijo, 'Sacaremos tu música en nuestro sello discográfico'. Una vez que ocurrió eso, fue el inicio de mi carrera discográfica. 'Carry On' es mi decimotercer disco o decimocuarto disco en esa carrera. Todo disco del que he sido parte y todo disco que he hecho ha sido igual de importante que cualquier otro. Nunca he hecho un disco del que pensara, 'bueno, esto no es algo en lo que no vaya a poner lo mismo que en ese otro disco'. Cuando estaba en Soundgarden y estábamos componiendo canciones para 'Badmotorfinger' , compuse muchas canciones. Compuse el doble de canciones de las que aparecieron en el disco y aún hice lo de Temple Of The Dog y no tuve la sensación de que Temple Of The Dog fuese algo rapidito que iba a hacer y que no me importaría una mierda. Tuve mucha dedicación a ese disco, igual que con el disco de Soundgarden y sentí lo mismo con los discos de Audioslave. Han sido álbums muy importantes para mi. La misma sensación. Las circunstancias cambian un poquito. Las circunstancias en cuanto a lo que elijo para componer. Como tomo esas decisiones, lo que termina siendo el resultado final. Esa clase de cosas pueden cambiar un poquito pero al final se trata de una carrera discográfica.

Pero es genial poder saltar de un repertorio a otro. La única barrera con la que te acabas encontrando es el tiempo. Estábamos en Nueva York y hicimos un montón de conciertos en festivales y no pudimos hacer pruebas de sonido y a mi me gusta hacer pruebas de sonido largas. No me molesta, a veces son de dos horas. Y ahí es donde literalmente empezamos y vamos aprendiendo canciones de mi catálogo. Y no hemos tenido muchas de esas (pruebas de sonido). No hemos podido ir sumando canciones lo rápido que me hubiera gustado. Entro online y voy pillando colecciones de todos los títulos de canciones de todos los discos y las voy viendo y hay tantas, porque yo a veces me olvido de canciones y los fans te dicen, 'Desearía que tocaras esa' y yo digo, 'Claro, sería genial'. Pero aún no nos la sabemos. Las pruebas de sonido se han convertido en ensayos donde tenemos que ensayar… porque nos sabemos tantas canciones ahora que tenemos que ensayar algunas de ellas que no hemos tocado en un tiempo para no olvidarlas. Luego tenemos que hacernos con algunas cosas nuevas y entonces ya tenemos una canción nueva que tocar. Parte de mi tiene la sensación de que podría salir de gira y hacer cualquier cosa… He visto a Elvis Costello hacer esa clase de gira de Attractions, donde salía y no hacía otra cosa que tocar canciones de los dos primeros álbums, lo cual es un punk rock bastante básico y luego le he visto en giras haciendo justo lo contrario a eso. Yo tengo la habilidad de hacer eso. Pero ahora no lo hago. Ahora es como desde el principio hasta el final, incorporando todo lo que puedo de los diferentes campos de canciones que he hecho a lo largo de los años y tratando de que encaje en dos horas y que tenga sentido. »

Creo que mucha gente piensa que si tienes éxito como artista, se acabó, has logrado aquello en lo que has invertido toda tu vida. Pero es realmente el principio.

Le pregunta sobre la incorporación a su banda del frontman de Burning Brides, Dimitri Coats, para tocar la guitarra (en el disco toca en cuatro temas). «Fue una fácil elección porque ya le había visto tocar y le había oído. Así es como normalmente funciona. Este ha sido el primer disco en el que he trabajado con gente que no conocía. La gente con la que he trabajado y que no conocía fue cosa de Steve Lillywhite, el productor, para que tomara todas esas decisiones y quería ver como salía y era algo no demasiado cómodo, al menos en mi mente. A eso de una semana de empezar a grabar estaba nervioso por ello. Pensaba, 'Esto va a ser raro. No sé si me gustará. No sé como será'. Luego empecé a pensar, 'Bueno, espera un minuto, cuando me metí en el estudio con Audioslave tampoco conocía muy bien a esos tíos y tampoco sabía como iba a salir'. Y salió bien. Cuando me metí en el estudio con los tíos de Mother Love Bone e íbamos a hacer Temple Of The Dog, no sabía como iba a salir y salió genial. Lo superé y al primer día ya estaba trabajando con una sección rítmica que no conocía de antes. No sabía nada de ellos y el guitarrista acababa de tocar la guitarra acústica y de golpe ya estábamos haciendo todo, bajo, guitarras acústicas y batería y yo cantando y la cosa funcionó. Sonaba genial. Somos un puñado de adultos a los que les encanta hacer música. Las cosas empeizan a solidificarse. Los otros músicos que traje después fue más en plan, 'Vale, sé lo que hace este tío y sé lo que hace aquel. Quiero que se vengan y toquen en estas canciones específicas porque es lo que necesitan'. Luego lo igualé con mi guitarra, tocando por encima de mi propio disco y le añadí y quité cosas.»

Para concluir la entrevista, le hacen recordar como fueron aquellos tiempos de primeros éxitos con Soundgarden. «Fueron tiempos emocionantes, realmente caóticos, y como aterradores. Pienso que había muchas cosas que teníamos que demostrar. Que especialmente yo tenía que demostrar. Desde que empezamos Soundgarden tuvimos esa especie de aliento en plan, 'Tíos, podéis ser el futuro del rock. Podéis ser dentro de diez años esa clase de banda que abarrota los estadios. Podéis ser el futuro del rock'. Pero nosotros no montamos la banda para hacer eso. Así que fue como esa nueva idea y de golpe la cosa pasó de ser sólo Soundgarden a ser también sus amigos y sus bandas. Y eso fue aceptado mundialmente, lo cual es una locura porque a nosotros nos pasaba simultáneamente. Pero a la vez era algo cínico porque estaba ocurriendo porque todos los estábamos haciendo a la vez. Sucede porque estábamos todos juntos y veníamos del mismo sitio. No porque seas una banda genial o porque puedas componer grandes canciones y hacer grandes discos. Aparte de ser un periodo emocionante, fue también un terreno donde debíamos probar y hacer álbums geniales y demostrar que no estábamos ahí por ser parte de una moda pasajera y es por eso que nuestra gente compró los discos. Fue porque éramos compositores con talento y una gran banda de rock. Y lo hicimos. Creo que mucha gente piensa que si tienes éxito como artista, se acabó, has logrado aquello en lo que has invertido toda tu vida. Pero es realmente el principio. Veo aquella época como bastante estresante; loca pero también bonita.«