Ray Luzier: «Quise estrangular a Ross Robinson»

El batería de Korn, Ray Luzier, ha hablado con Sonic Excess como fue la grabación del último disco de la banda con el regreso de Ross Robinson a la tarea de productor.

«Para los tres chicos originales fue como una reunión familiar. Ross tuvo mucho que ver con como sonaban en los dos primeros discos. Fuimos atrás, a la vieja escuela. Ross dijo que nada de 'click tracks' (una forma de metrónomo para que el batería logre mantener un ritmo constante). Normalmente, para un batería eso es una pesadilla porque siempre queremos una máquina que nos vaya manteniendo el paso. Dijo que nada de 'click tracks'. Vamos a la cinta de dos pulgada y nos metemos en una habitacioncita estrecha. Estábamos en una habitación de 4 x 3 metros y lo que quería es que estuviésemos lo más incómodos posible, a lo vieja escuela. Quería que volviéramos a como cuando empezaron con aquella hambrienta pasión y era brutal. Nos íbamos de ahí cada día sudando y sangrando (risas)

A mi me las hizo pasar canutas. Yo y Jon (Jonathan Davis) lo pasamos peor. (Robinson) quería asegurarse de que yo sabía, bueno, uno no se une simplemente a una banda como Korn. He estado en un montón de bandas grandes, como Stone Temple Pilots y David Lee Roth pero nada es comparable a Korn.»

Afirma que «las dos primeras semanas quería matarle, si he de ser sincero. Quería estrangularle (risas) Nunca había querido estrangular a nadie con tantas ganas en toda mi vida. Me hizo sentirme pequeño y me sentía como que era el peor batería. Pero después de un poco, empecé a ver el método que seguía. Componíamos una canción y, unos 30 o 45 minutos después, la grabábamos para el disco. Era tan fresco que no había tiempo para pensar en transiciones o la siguiente parte. Si yo paraba en medio de una canción, decía, '¿Por qué paras? ¡Ni se te ocurra parar!' Y yo le decía, '¡Pero si no sé qué viene luego! y me decía, 'Invéntate algo, haz tiempo!'. Tuve como dos tomas, quizá tres, y eso es lo que se oye en el disco. Así que, para mi, tiene que ser perfecto pero sabes, ahora que echo la vista atrás, todos somos humanos, nuestros corazones laten a distintas revoluciones. Estoy harto de esos discos que suenan perfectos. Todo está arreglado. Está cuantificado, las voces son perfectas y la batería es tan perfecta. No suenas así en directo. Así que, ¿para qué lo haces en el estudio?»

Sobre coger el camino analógico, indica que «fue una combinación pero Ross propulsó la idea de meterle el analógico y los chicos se apuntaron. La batería tiene calidez. Oyes eso en el disco. No puedes sacar eso de algo digital. Quizá el aceite de la cinta o algo logre eso, no sé (risas) Por supuesto todo se transfirió a Pro Tools pero doblando la menor cantidad de pistas.»

Confirma el batería que Jonathan Davis volvió a llorar (como ya ocurriera en los dos primeros discos del grupo) al cantar uno de los temas del álbum: «Lo puedes oír en 'Holding All These Lies', la última canción del disco. Lo dejó todo ahí. Es decir, en eso se centra todo. Por eso (el nuevo disco) se llama 'Korn III Remember Who You Are'. Es la vuelta a esa sensación, esa hambre.»

Habla Luzier sobre el curioso concierto que dieron en un círculo de cultivo (crop circle) en algún lugar de su Bakersfield natal: «Eso moló mucho. El management iba a hacer eso, en plan 'Live At Pompei' (de Pink Floyd) y los chicos querían hacer algo diferente. Así que salimos ahí sin público en medio de Bakersfield. La gente vino de Europa para hacer esos círculos de cultivo y da su repelús. Hicimos eso. Empezamos al atardecer y se hizo de noche. Salió en HD.net y se puede ver todo en Myspace. Fue una locura. Era una jam de hippies. A Fieldy le salía un ritmo, Monk le daba con el pedal y tocábamos algo y luego una nueva canción. No fue algo coreografiado sino improvisado. Planeamos un setlist; enfocamos algunas cosas como para decir 'debemos tocar esto o aquello' pero las jams y lo demás salió de la nada. Fue una locura porque nos mirábamos unos a otros pensando, 'Mmm' (risas) Había helicópteros sobrevolando.«