Pulled Apart By Horses: «Si vas a pasar varias semanas con la misma gente lo mejor es llevarte bien»

Tras sorprendernos con un explosivo debut, los británicos Pulled Apart By Horses pasaron por España como teloneros de Anti-Flag con un incendiario set, comiéndose con patatas los otros dos grupos de aquella velada. Tras su breve actuación tuvimos la suerte de hablar con ellos, en una interesante charla.

Hace menos de dos meses editaban su segundo trabajo, «Tough Love» que les confirmaba como una de las bandas más interesantes del Reino Unido: su explosividad si bien no ha sido domesticada, si ha logrado ser catalizada para usarse cuando es menester.

Sabiendo de su visita por tercera vez a España, pA no hemos desaprovechado la oportunidad de volver a reunirnos con ellos para hablar de todo un poco en una agradable conversación.

pA: ¿Os queda nada y menos de gira, no? ¿Lo siguiente son los festivales?

Lee Vincent: Si, creo que tenemos unas pocas fechas europeas más.

Tom Hudson: Un concierto en Zurich…

LV: Luego tenemos un par de semanas libres y luego tres o cuatro conciertos. Y luego ya es tiempo de festivales. ¡Que venga el verano! (risas)

pA: Bueno, ya casi lo tenemos aquí. Hace cosa de 2 semanas hacía por aquí un frío tremendo pero llevamos unos días con muy buenas temperaturas.

LV: Tocamos en Londres, la última fecha de nuestra gira por el Reino Unido y hacía 16 grados. Íbamos en camiseta por la calle así que ya estamos preparados.

pA: ¿Como está yendo la gira?

TH: Está siendo increíble. Aún no hemos tenido un concierto malo. En otras ocasiones si hemos tenido algún concierto que no ha estado al mismo nivel pero en esta gira está yendo todo genial.

LV: Si, en Inglaterra tocamos en locales más grandes y eso ya era un triunfo.

TH: ¡Lo logramos! (risas)

LV: Si, es una mejora. Y en esta gira hemos tocado ante 200-300 personas por noche. No hemos hecho mucho por nuestra cuenta por aquí así que es buena señal. Hemos tenido la suerte de salir con dos de las mejores bandas que hay ahora mismo en el Reino Unido: Computers ahí y Turbowolf en Europa así que, la verdad, ha sido maravilloso.

pA: ¿Turbowolf no han venido a España por alguna razón?

LV: Bueno, tenían fechas por su cuenta. Andaban en Oostende, Bélgica y les quedaban algunas otras fechas más con The Subways en una gira por Alemania. Hubo que tomar caminos diferentes hace poco…

TH: Si, fue un poco, ‘Ooooh, tíos, ha sido genial, os queremos’ (risas) Ya sabes, todo muy emocional.

pA: ¿Qué tal está reaccionando el público al nuevo material? Supongo que se notará más en el Reino Unido que no aquí, donde tampoco habíais tenido ocasión de girar tan extensamente con vuestro primer disco…

TH: No estábamos muy seguros de lo que iba a pasar en Europa. Quizá algunas canciones no se las conocen tan bien pero luego otras como ‘V.E.N.O.M.’, el último single que hemos sacado, y algunas más que incluso corean y te quedas en plan, ‘Joder, que ha salido en enero, hace nada’.

LV: En Inglaterra es más sencillo calcular donde estamos y llegas a Europa y es algo desconocido. Ver a la gente cantando las canciones, tanto las nuevas como las viejas te alucina. Ya te digo, ver que se saben incluso las viejas te deja flipado. Lo cierto es que ha sido una buena recepción. La mayor diferencia entre públicos te diría es que la gente aquí no llega al nivel de locura… La gente es receptiva pero a veces nos hace falta que algún amigo que tenemos en diferentes ciudades nos diga, ‘Oh, el público ha quedado encantado’ y decimos, ‘Guay’. Ya sabes, que nos diga si el concierto ha ido bien o mal porque si bien nosotros hemos disfrutado, no sabemos (si al público le ha gustado).

RJL: Han habido algunos conciertos en los que los promotores nos han dicho, ‘No es muy normal que el público de aquí haga eso’…

pA: Pues eso os debe dejar buen cuerpo, claro.

LV: Moló ver en el concierto de Londres, el último, había como 1000 personas y parecía que se mataban unos a otros, de buen rollo, eso si (risas) Una locura. Y el caso es que al día siguiente estábamos en Bruselas en Le Botanique ante como 20 personas y estaban felices y bailando (risas) Pero sienta igual de bien. Mientras se estén divirtiendo, da igual como lo expresen: lo están pasando bien.

TH: Creo que, en general, en Europa la gente se controla mucho más. En el Reino Unido en las tres primeras canciones la gente ya está ‘Yeeeaaaaah’ y se pasan el resto del set tratando de recuperarse. En Europa, la gente está ahí de pie relajada, van moviendo la cabeza y se van metiendo poco a poco en el concierto.

RJL:Tu tratas de seguir esa energía que va creciendo. A veces puedes frustrarte debido a que la gente ya está perdiendo el control inmediatamente. Creo que salir de gira por Europa es bueno para ver muchos sitios diferentes y diferentes públicos. Es una buena manera de calcular como llevar la reacción del público.

LV: Y también sirve para aprender que ver a gente sonriendo y meneando la cabeza es la forma entusiasta de demostrar su (felicidad) en una determinada ciudad. La excepción fue Copenhagen, donde los chavales perdieron la cabeza: había gente vomitando en cubos, gente a la que arrastraban de la pierna…

TH: También trataron de robarnos nuestro material…

RJL: Hubo un tío que me robó uno de mis pedales al irme del escenario. Ese fue uno de los conciertos más aterradores que hemos hecho.

TH: No pasamos miedo por nosotros si no por ellos.

RJL: Nos preocupamos por ellos, era como, ‘Tíos, venga, va…’

TH: Eran como lemmings (risas) Tratando de suicidarse o algo…

pA: ¿Son muy evidentes las diferencias entre el público de países? ¿Son los belgas más tranquilos y los italianos más alocados?

TH: Bueno, no quiero generalizar pero en Bélgica hay mucha más gente mayor que lleva metida en el rock desde hace muchísimos años que probablemente irá a dos conciertos a la semana o así…

pA: O sea que están más acostumbrados y se sorprenden con menos facilidad…

TH: Si, si. Están como más relajados y acomodados, y escuchan y disfrutan desde el fondo.

RJL: Pero aún así había algunos chavales saltando y empujándose. Aunque era más bien un baile chapucero (risas) No era tan agresivo como en otros sitios.

TH: Alemania suele ser más alocada, con gente más metida…

pA: ¿Y dentro de un país, en este caso Alemania, también hay diferencias?

TH: Hamburgo fue especialmente increíble.

LV: Hostia, no me acuerdo cual fue el concierto de Hamburgo…

TH: Si, en el Molotow.

LV: Ah, si, si. Bueno, Berlín fue un público más tranquilo, más experimentado. Nunca falta un pequeño sector más entregado pero bueno, al final, así es como solía ser en Inglaterra para nosotros. Y es que estamos empezando a un nivel mucho más bajo, desde el principio.

TH: Pero es bonito hacer la gira por el Reino Unido y luego venir aquí.

pA: Os sirve para comparar.

TH: Si, para comparar. Pero también para no venir con muchos humos y venir en un rollo más ‘hazlo tu mismo’.

RJL: La mayor parte de la gira hemos tenido el equipo de gira más grande que nunca hayamos tenido, muchísimas personas con nosotros y es la gira más grande que hayamos hecho. Al venir a España, hemos tenido que venir en avión porque no podíamos permitirnos venir en furgoneta y nuestros técnicos no han venido así que hemos vuelto a quedar reducidos a nosotros cuatro para hacerlo todo: sacar los instrumentos, prepararlos… Cuando nos enteramos que íbamos a tener que hacer eso nos pusimos, ‘Puaj, ¿ahora nos toca hacer eso?’ (risas) Pero no puedes actuar así.

LV: Es bueno ver que puedes seguir haciéndolo, reducido a solo la banda.En fin, las diferencias lo hacen más especial aún.

RJL: Pero hablando de los diferentes públicos y las diferentes reacciones, una de las cosas que cada vez pasan más en las diferentes ciudades es ver a chicas entre el público. Nunca quisimos ser una banda de rock solo para hombres, ¿sabes? (risas) No queríamos ser una cock-rock band (risas) Queríamos un poco de ambos (sexos). Bueno, y toda clase de gente diferente.

TH: Rob está contento porque al fin puede mirar a mujeres (risas)

pA: ¿Se nota lo de ser cabezas de cartel y venir como teloneros? La anterior vez que estuvisteis por aquí fue como teloneros…

LV: Bueno, aquella gira era una verdadera gira punk-rock. La verdad es que no encajábamos demasiado bien en aquel cartel (Anti-Flag, The Swellers). Aún así había siempre alguien cada noche que venía y nos decía, ‘Oh, ha estado guay’. Pero éramos como la oveja negra de ese cartel. A veces es muy saludable hacer eso porque te encuentras con dificultades y, sin duda, en esa gira se nos hizo la piel más gruesa.

TH: A veces, cuando teloneas a una banda más grande hay como un equilibrio entre… Bueno, es su público.

LV: Tienes menos presión porque han venido a ver (la banda grande) pero a la vez tienes presión porque quieres impresionar (al público).

TH: Claro, quieres ganar público o al menos hacer lo que haces.

pA: ¿Realmente se gana público nuevo en esta clase de giras?

TH: Creo que si. Eso es lo que mola de telonear, que no es necesariamente tu público y si puedes, al final de la noche, convencer a diez personas o a quien sea, mola porque han entrado sin conocer a tu banda y acaban diciendo, ‘Voy a echarles un vistazo, a comprarles un CD’ o lo que sea…

LV: En Inglaterra nos pasamos año y medio simplemente teloneando a otras bandas. Biffy (Clyro), The Bronx, Glassjaw, Blood Red Shoes… Eso fue algo realmente importante para nosotros. Y luego hicimos una gira como cabezas de cartel y vimos -no una locura de crecimiento- pero si más público. Y mucha gente nos decía, ‘Os vimos con The Bronx y nos gustasteis’.

RJL: Aprendimos mucho sobre como operan bandas como esas, de un nivel superior. También aprendes muchas cosas de la ética de girar y donde están las líneas porque es su ‘show’…

TH: ‘No robes esa comida’ (risas)

RJL: (risas) Si, si. Y sabes, también te sirve para cuando llevas tu una banda de gira, hagas que esté más cómoda.

TH: En las primeras fechas de la gira con Turbowolf y The Computers teníamos minúsculos vestuarios y luego ya teníamos uno más grande porque fue como decir, ‘Entrad’.

pA: No es como si fuese vuestra casa, ¿no?

LV: Uno quiere crear una atmósfera agradable y fortalecer la amistad y esas cosas.

TH: Esa es la cosa. Si vas a pasar una o dos semanas con los mismos tíos quieres llevarte bien y mirar al otro extremo de la habitación sin estar diciendo ‘¡Que te jodan!’

pA: (risas)

RJL: Creo que una de las cosas de la gira de Anti-Flag -y no quiero faltar ni meterme con nadie- es que las dos bandas no se llevaban bien. Quizá habría ido mejor si personalmente se hubieran llevado mejor…

TH: Si. Sabes, esos tíos ya tienen mucha experiencia. Tenían mucha promoción. No es que fuesen demasiado extrovertidos en el sentido de… No es que no bebamos ni nada de eso… Con los chicos de The Swellers nos hicimos amigos y aún mantenemos el contacto con algunos de ellos. Mola hacerte amigo de gente así. Creo que hay bandas que llevan en esto mucho tiempo y supongo que están más hastiadas y amargadas. Es en plan, ‘Ya tenemos amigos’ (risas)

RJL: Yo creo que si alguien va a un concierto y ve todas las bandas y disfruta con todas ellas, es mucho mejor que si va solo a ver la principal y no le presta atención al resto. ¿Qué sentido tiene eso? En la primera opción, hay más energía en el local. Y esa es una de las grandes cosas que hemos tenido con las dos bandas con las que hemos salida de gira, Turbowolf y The Computers, que animan muchísimo al público.

TH: Y les vemos desde el lateral del escenario y nos quedamos, ‘¡Joder!’.

pA: Es que cuando tienes un buen telonero, no necesitas hacer mucho para contentar al público.

LV: Si, todo el mundo está arriba.

TH: También es una competición sana. No se trata de superarnos los unos a los otros pero si los ves a ellos tocando de maravilla, tu quieres igualarlos.

RJL: Es más estimularse que no otra cosa…

LV: Quieres una buena atmósfera.

RJL: Si, quieres tener una buena atmósfera toda la noche.

LV: Puedes ver, cuando vas a un concierto de bandas que están de gira, si alguien de una banda sale a cantar en una canción de la otra banda, ves que todos probablemente se lleven bien. Y eso sienta bien. Esa fue una de las cosas que me atrajeron de estar en una banda, esa clase de camaradería. Esa era la atracción mía por salir de gira.

RJL: Ese buen ambiente, esa camaradería es realmente importante porque cuando estás a nuestro nivel, nosotros cuatro, metidos en una furgoneta todo el día, en los momentos en que te sientes cansado o cabreado y estás mirándote en plan, ‘¡Te odio, joder!’. No es real pero mola meterte en un local y ver, ‘¡Oh, es ese tío!’…

LV: Si, 6 nuevas personas con las que hablar (risas) Le quita intensidad, en el buen sentido.

pA: Cambiemos de tema. ¿Qué significa internet para una banda como vosotros? ¿Es útil? ¿Os hace daño?

LV: Al principio fue inmensamente útil. Cambió el panorama en el sentido de que las bandas pequeñas pueden hacer muchísimas cosas por su cuenta, pueden sacar su música, pudiendo, dar, virtualmente, la música gratis a todo aquel que pueda encontrarla. La cruz son las descargas ilegales. Pero tienes que evolucionar con lo que pasa. Quizá llegue un momento en que todo eso sea legislado. Todas esas bandas de rock andan quejándose y tal pero es que tienes que adaptarte a los tiempos, no vas a pararlo.

TH: Creo que la gente no se da cuenta es que aunque la gente cada vez descarga más, los vinilos y discos están volviendo, son cada vez más populares especialmente entre los fans más acérrimos, los grandes amantes de la música. Vuelven a comprar vinilos y tal lo cual mola, la verdad.

LV: Además le pone más énfasis en el merchandising, como camisetas y tal. Mucha gente no es gilipollas y si consigue el álbum gratis y le gusta la banda, querrá apoyarla comprando una camiseta o un disco…

pA: O va a un concierto…

LV: Exacto, exacto.

RJL: Si, además eso es algo real, que no puedes reproducir en tu cuarto.

pA: Claro, puedes hacer un DVD pero no es lo mismo…

LV: Si, si. Y además vivimos en una situación económica muy difícil y la gente no tiene mucho dinero para gastar. No lo sé…

TH: Con el nuevo álbum al estar un poco más orgullosos de él terminamos… James hizo una versión falsa del álbum que era ‘V.E.N.O.M.’ entera y luego 10 segundos de cada canción seguidos de (James) y Rob borrachos, trozos de música de videojuegos… (risas)

LV: Nosotros somos ahora la policía de internet: si no quieres que tu álbum se filtre, ven a vernos (risas)

TH: Hubo tanta gente que pensó que se había filtrado que pensamos que era el real, pero al oírlo vimos que era un torrent falso. Eso nos hizo pensar, ‘¿Qué podemos hacer? Ah, haremos un álbum falso’. Eso llegó incluso a provocar que nos viniera un chaval realmente honesto que nos dijo, ‘Mierda, me he bajado el álbum falso así os he comprado el álbum de verdad’.

RJL: Esa me parece una manera positiva de verlo… En ese momento estaban siendo tumbados muchos sitios de torrents por el gobierno americano que iba tras ellos anunciando que lo que se hace en esas páginas es algo grande y malísimo… No creo que esa sea la mejor manera de hacerlo. La gente debe encontrarle el valor a lo que baja y comprar los discos de sus bandas favoritas. Igual que si alguien compra un álbum en vinilo debería poder tener la oportunidad de descargarlo en mp3 para escuchar en su teléfono o el iPod porque tiene el derecho a hacerlo por haberlo comprado.

TH: Yo lo hago al revés: descargo música de bandas que no conozco para ver si me gusta o no. Si me gusta me lo compro en vinilo.

LV: Sabes, no lo sabemos… Puede que tengamos muchísimos más fans gracias a las descargas ilegales, que quizá hayan venido a los conciertos o comprado camisetas o descargado y luego comprado el álbum… Puede ser un arma de doble filo: también puede exponer tu banda a mucha más gente. Creo que son más bien las viejas bandas, las más ricas, las que tienen más miedo… Las bandas que salen ahora son más de pensar, ‘Tenemos que aprovecharnos de esto’.

TH: Creo que el Reino Unido es peor con lo de las descargas, en general. Aún siendo el Reino Unido un sitio tan pequeño, hay tantas bandas diferentes… El NME saca una banda favorita cada semana, ha cambiado completamente. Y creo que el público joven de la escena musical tiene muy poca paciencia y se ponen en plan, ‘Pilla esto, aquello, descárgate esto’…

LV: Una de las cosas que más miedo da y que no es sana es que muchos chavales, especialmente los más jóvenes que conocen a una banda, ni siquiera comprenden porqué debería estar mal (descargarse música). No llegan a plantearse la pregunta ética, se lo llevan gratis. No piensan, ‘Quizá esto vaya para la banda (si pago por ello)’, no, es directamente, ‘Bah, puedo conseguirlo gratis’. Así que supongo que debería educarse un poco más a la gente.

pA: Creo que debería ser la mejor manera de afrontar esto: no puedes hacer leyes para quitar a la gente de internet porque internet lo hace la gente, no es una realidad alternativa.

LV: Si la gente tuviera la información referente a lo que es estar en una banda… Sabes, es una lucha, no hay mucho dinero. Si supiéramos lo que pasa y cual es el proceso de todo… Al menos podría tomar una decisión. Y si aún así dijera, ‘A la mierda, yo lo consigo gratis’, pues vale, pero al menos ha tenido que tomar una decisión.

pA: En el pasado ocurría mucho lo de ir a la tienda de discos y comprar uno habiendo escuchado una o dos canciones. Y podía ser que el resto del disco fuese una mierda. Ahora al menos tienes la oportunidad de escucharlo entero y no tiene porqué ser descargado: lo puedes oír en ‘streaming’.

LV: Exacto. Eso es lo que hemos hecho con ‘Tough Love’.

pA: ¿Con el NME, no?

LV: Muchas bandas lo están haciendo. Es una buena manera de hacerlo. A mi me parece un paso en la dirección adecuada.

TH: Hicimos una cosa con una aplicación en Facebook: podías escuchar el disco durante una semana y luego ya no podías escucharlo más pero si lo mandabas a un amigo, podías descargarte gratis una cara B. Eso hacía que, de alguna manera, la gente quisiera compartirlo.

LV: Nos pareció guay y era hacer algo un poquito diferente.

TH: No habíamos oído de ninguna banda que hubiera hecho eso. Fue una idea de nuestro management y dijimos, ‘Suena guay, ¿por qué no hacerlo?’

pA: En estos tiempos tienes que probar cosas diferentes.

LV: Esa gente es la que hace que todo esto continue: pensando, teniendo ideas nuevas para atraer la atención de la gente. En lo que respecta a la promoción no hay muchas ideas nuevas así que nos pareció una idea guay.

RJL: Con esto de la piratería, recuerdo cuando era niño que tenía montones de cintas que iban pasando entre amigos…

TH: Aquí tienes a Green Day y Nirvana en la otra cara (risas)

RJL: Si, si. Es una búsqueda y cuando encuentras tu banda favorita compras todo lo que saca. Y las camisetas y vas a los conciertos si puedes…

pA: El CD con los temas de bonus o la edición japonesa…

LV: Exacto, solo que ahora todo esto es a una escala diferente.

RJL: Sería bonito que la gente aún estuviera haciendo eso en lugar de tenerlo todo gratis…

LV: Tengo la cínica creencia en la gente de que hay suficientes fans auténticos de la música que apoyarán a las bandas de un modo u otro.

pA: ¿Será posible dentro de diez años seguir subsistiendo como banda? ¿De hacer dinero siendo un grupo de música? No sé si sacáis mucho dinero de esto…

LV: Solo un poquito…

(risas)

TH: Mira, sacamos lo justo para pagar el alquiler, comer…

LV: Si trabajáramos en una tienda en Inglaterra probablemente tendríamos el mismo dinero… Y esto es mejor que trabajar en una tienda (risas)

TH: Sacaremos el salario mínimo o así.

pA: Pero al menos hacéis algo con lo que disfrutáis.

TH: Y viajamos…

LV: Creo que siempre habrá bandas y siempre habrá gente con ideas que… En los últimos años las bandas se centran mucho más en el merchandising y las camisetas para darle a la gente una alternativa. Especialmente esto de las camisetas porque no te puedes descargar una camiseta… La gente siempre va a querer una camiseta de un grupo.

pA: Enseñar que le gusta una banda.

LV: Si, si. Y entonces ves como las bandas van dedicando más tiempo y esfuerzos a hacer más y mejores diseños de camisetas. Así que, si, la gente siempre encontrará la manera (de seguir adelante).

TH: Nos pasó cuando tocamos con Rolo Tomassi, ¿no fue?

LV: Si, si.

TH: Aún eran poco conocidos y tenían como ocho diseños de camisetas diferentes. Y mirabas su merchandising y eran cosas realmente bien diseñadas. Te quedabas, ‘¡Hostia!’. Es increíble que hubiera tanta variedad y posibilidades de elección. Y creo que debían vender más ‘merchandising’ por el hecho de tener tanta elección y que no todo el mundo tuviera la misma camiseta.

LV: Nosotros teníamos más pero esta noche solo nos queda un modelo de camiseta porque hemos vendido todo en la gira. Así que estamos en plan, ‘¿Quien quiere una camiseta de la gira?’ (risas)

TH: La clásica camiseta de gira…

pA: ¿Se hacen muchos sacrificios por ser una banda que está tanto tiempo en la carretera?

LV: Si, bueno, no sé si serían sacrificios… Tenemos suerte de tener a gente que nos apoya mucho en casa porque estás mucho tiempo fuera y es duro pero es más bien algo personal, el echar de menos a gente, ya sabes. Tiene sus pros y contras. Los pros acaban prevaleciendo porque viajas y tocas música y tal.

TH: La cosa es que -especialmente Lee ahora que está casado y tiene una niña- pasas mucho tiempo lejos y de forma intensa, como con esta gira, que llevamos, ¿cuanto?

LV: Esta gira es de tres semanas.

TH: 20 días y son muy intensos. Tenemos que volver y así Lee tiene una semana para estar con su familia. Es jodido porque vamos teniendo trozos de tiempo…

LV: Acabas teniendo una doble vida.

(risas)

TH: Pero cuando estás en casa de relax también llega un punto en el que te quedas sin cosas por hacer (risas)

LV: Cuando estoy en casa soy padre a tiempo completo. En cambio cuando estás de gira no tienes más responsabilidad que meterte en la furgoneta cada mañana. Estos tres últimos años nos hemos ido labrando una reputación de banda de directo, de estar siempre en la carretera y eso nos ha hecho mucho bien para llegar donde estamos ahora. Así que cuando salimos ahora nos centramos en hacer mejores conciertos o que funcione en un periodo más pequeño de tiempo, no estamos lejos (de casa) tres meses seguidos porque es entonces cuando las relaciones empiezan a sufrir.

TH: Cuando empezamos como banda no teníamos dinero para dejar nuestros trabajos y hacer que la banda fuese funcionando e hiciese giras. Y tampoco sacábamos dinero de los conciertos y teníamos novias que nos decían, ‘¿Por qué lo hacéis?’ y así. Tienes que seguir adelante y perseverar.

LV: Y solo ahora es cuando empezamos a respirar, por así decirlo. Pero hemos aprendido que podemos ser igual de efectivos y potentes como banda haciendo giras de tres semanas más que no giras de tres meses. Lo hace todo más importante. Y así además cuando vuelves a salir de gira tocas en las ciudades que en la anterior gira no tocaste y te evitas que la gente diga, ‘Oh, ya están estos otra vez aquí’, ¿sabes?

pA: ¿Tenéis tiempo para visitar las ciudades por las que pasáis?

LV: Esa es una de las mierdas de salir de gira: no te queda mucho tiempo para…

TH: No demasiado, al menos en esta gira.

pA: Es llegar y al local, ¿no?

LV: A veces te das una vuelta por los alreedores.

TH: Cuando eres cabeza de cartel, haces la prueba de sonido al principio y luego te queda tiempo…

pA: Pero no es suficiente como para hacerte una visita a la ciudad.

TH: Puedes darte una vuelta a la esquina pero no puedes ir a mirar la ciudad ni ver una panorámica ni nada.

RJL: Yo siempre trato de darme una pequeña vuelta.

pA: Para ver qué pintas tiene la gente, ¿no? (risas)

RJL: A todos nos gustaba bastante lo de viajar antes de estar en la banda y cuando tenemos tiempo libre es una buena manera de invertirlo. Es bueno hacerlo también de forma más reducida, más concentrada cuando estás de gira. Puedes aprender muchísimo de un sitio simplemente metiéndote en un bar o conversando con alguien del lugar.

LV: Una de las cosas buenas de visitar países estando de gira es que hablas con gente del país. Normalmente cuando estás de gira terminas hablando con la gente: la gente que viene a tu concierto termina hablando contigo, algo que si visitaras de forma normal el país no pasaría.

TH: Cuando viajas tu, sueles acabar en medio de otros turistas…

LV: Si no conoces a nadie en la ciudad, puede que ni hables con nadie más allá de pedir algo de beber o así.

RJL: Cuando empezamos tuvimos la oportunidad de venir una semana de gira a España… ¿Con quien fue?

TH: ¿Anteojos Booking? Si, son de Madrid. Fue una cosa DIY e hicimos la gira con una banda madrileña llamada Rosvita.

RJL: Si, Rosvita, grandes tipos. Y el caso es que no hablan demasiado inglés y nosotros no hablamos demasiado español. Y vivimos con esos tipos durante una semana y fuimos capaces de comunicarnos con ellos y mucho fue gracias al sentido del humor.

LV: Es maravilloso cuando puedes ir a comer donde van los españoles realmente a comer.

pA: Es decir, no veíais la cara turística sino la verdadera.

LV: Si, veíamos la verdadera España.

RJL: No era ir a un bar de tapas muy caro en una calle principal sino que Eli (de Anteojos Booking) nos decía, ‘Estas son las verdaderas tapas’ y eran orejas de cerdo, ¿sabes? (risas)

LV: Si, sitios pequeñitos. Esa gira fue muy especial para nosotros y es muy raro conseguir algo así. Fue prácticamente la primera gira que hacíamos así que no había presión y estábamos preparados para todo. Eran otros tiempos pero si pudiéramos hacer más giras como aquella sería fantástico pero claro, a medida que te haces más grande como banda -que también es lo que quieres- más gente, más prensa, sets más largos. En definitiva hay más por hacer durante el día y deja el tiempo libre en casi nada. Y si tienes tiempo libre, quieres descansar.

RJL: Tienes que pagar más alquiler por tu casa más grande (risas)

LV: Esas grandes mansiones que tenemos (risas) Vivo en una casa a lo Jay-Z (risas)

pA: Y tienes 3 novias y todo eso, claro (risas) Hablabas de la prensa, ¿como lo lleváis? ¿Hacéis muchas entrevistas?

TH: Si, muchas, si.

LV: Creo que no llega a ser una cantidad exagerada pero hay más…

pA: ¿Es aburrido?

RJL: No, lo disfrutamos, si, si.

pA: ¿Pero no cansa tener que hablar siempre de lo mismo?

LV: Bueno, si las preguntas son buenas y fluye una buena conversación, es divertido y se hace sin darse uno cuenta pero a veces tienes a gente que te viene con lo de ‘¿De donde viene el nombre de Pulled Apart By Horses?’ y esas cosas y tu te quedas, ‘¿En serio?’ (risas) Tío, puedes verlo en la Wikipedia. Vale, si podría estar mal (risas)

TH: Es como ahora que nos podríamos tirar hablando durante horas (risas)

LV: Cuando haces algo así mola, es divertido e interesante.

RJL: Además es una buena manera de ver qué piensan tus compañeros o como se sienten sobre muchas cosas (risas)

LV: Si, salen cosas y te quedas, ‘Vaya, no sabía yo eso’ (risas)

TH: Rob me tiene hasta los huevos (risas)

LV: Os odio a todos (risas) Nah, pero solo puede ser positivo: es otra manera de que alguien sepa de nuestra banda.

pA: Los veis, pues, como algo positivo, como un modo para conseguir más fans.

LV: Quizá… O bueno, en una revista si sale una banda que me gusta y les hacen una entrevista, me parece cojonudo porque es como una ventana en la mente de esa banda. Así que, quizá sea una manera de interesarte por una banda o si ya eres fan de una banda es una manera de conocer más de ella.

RJL: También te da una oportunidad para no ser tergiversado. Tienes la oportunidad de ser tu mismo.

LV: Y eso es lo que pasa con el NME que te citan erróneamente (risas)
TH: Si, se inventan cualquier cosa (risas)

pA: ¿Lo decís en serio?

TH: Mira, tienes una buena charla con ellos y luego ves lo que se publica y dices, ‘Yo no dije eso’ (risas)

pA: Y ellos no pueden excusarse en una mala traducción (risas)

LV: Nunca ha sido con mala intención pero por la razón que sea no escuchan lo que realmente les dices o no entienden lo que de verdad querías decir. Pero bueno, son cosas menores. Y al final es que son el NME y pueden hacer lo que les salga de los huevos (risas)

pA: Bueno chicos, muchas gracias por vuestro y tiempo y paciencia. Os vemos en un ratito.

(todos): Gracias a vosotros.