Dicen, cuentan, que en esto de la música la experiencia es fundamental para triunfar. Si esto fuera así, los chicos de Hail The Villain lo tendrían complicado…Este cuarteto de Ontario (Canada), está dando su primeros pasos en el siempre complicado negocio de la música, pero para conseguir triunfar no solo se necesita experiencia, sino cuando menos un puñado de buenas canciones y ganas de comerse el mundo. Y es aquí donde Hail the Villain echan el resto: no suele ser común encontrarse con un debut grabado por músicos sin experiencia previa, autofinanciado y con limitados recursos que suene tan potente, enérgico y honesto como este «Population Declining«.

Estoy seguro de que quienes decidan dar una oportunidad a este grupo van a percibir muy claramente la fuerza, el sentimiento y la melodía que desprenden todos y cada uno de los temas que componen este disco, algo que como la mayoría de nosotros sabe, no es algo de lo que puedan presumir muchas bandas veteranas. Este «Population Declining» no es un disco que busque innovar ni mucho menos. Es básicamente un ejercicio que combina muy efectivamente metal, rock alternativo e incluso algunas estructuras cercanas al punk.

Una buena fusión de voces calmadas y otras gritonas, encajadas perfectamente con la estructura de cada uno de los temas, hace que sean enormemente pegadizos, hasta el punto de que se hace difícil no escuchar el álbum incluso un par de veces seguidas.

Comienzan con «Take Back The Fear», un tema intenso y coreable que os recordará a bandas como Lostprophets y que sin duda es una delicia accesible pero tremendamente efectiva. Siguen con «My Reward», donde, sin perder de vista jamás el sentido melódico, nos entregan otra pieza coreable de espíritu metálico y con muchos ecos a Papa Roach. Para el tercer corte es posible que que no puedas dejar de mover tus extremidades así que sigue la energía con el tema con mayor vocación de single «Runaway» con un estribillo que no podrás quitarte de la cabeza. De aquí en adelante, el disco engancha definitivamente y aunque los siguientes cortes «16 Candles» y «Evil Has A Name», tienen un perfil un pelín inferior sirven de perfecta transición hasta «Try Hating The World», donde los ecos a los mejores Papa Roach son obvios, excelente tema y perfecto el trabajo del cantante con una versatilidad y capacidad lírica absolutamente destacable.

Los siguientes 3 cortes «Glad To Be», «BlackOut» y «Pyro», siguen una linea similar, estructuras deudoras del nu-metal que salen muy airosas gracias a la energía que desprenden. Prácticamente, sin darte cuenta, ya estás en la parte final del disco, que se cierra con los temas «Mission Control» que nuevamente me recuerda a Lostprophets y que tiene en la letra su mayor potencial, una buena muestra de compromiso social, algo que creo merece la pena destacar en una banda ‘underground’.

El penúltimo tema, «Swan Dive Suicide», es un medio tiempo melancólico y atmosférico, uno de esos temas que tanto gustan a Linkin Park actualmente y que como en el anterior corte, tiene en su letra gran parte de su atractivo. Llegamos al final y qué mejor modo de cerrar un disco que con un tema como «Social Graces», con un sencillo riff de guitarra, unos coros de lo mas efectivos y un sentido de la melodía y el ritmo que no permite que dejes de mover el pie (o la cabeza) en ningún momento.

Más allá de las comparaciones, de lo poco original que pueda resultar su propuesta o incluso de lo accesible que esta pueda ser, este disco es un auténtica delicia, siendo como son una banda nueva y sin mucha experiencia no puedo más recomendarlos y desearles un poco de suerte, pues potencial tienen y mucho…