Romance robado

Hace pocos días My Chemical Romance anunciaban que botaban al batería Michael Pedicone por robar a alguien de su equipo de gira. Hoy el propio Pedicone ha querido dar su versión de los hechos aunque sin inventarse una excusa demasiado rebuscada: no esconde su culpabilidad pero asegura que no robó para quedárselo sino para dejar en evidencia a alguien del equipo de gira del grupo.

A los medios, mis colegas en la industria musical y, lo más importante, a los fans de My Chemical Romance.

Como muchos habréis oído, el martes por la noche me despidieron como batería de gira de MCR. Las horas posteriores han sido difíciles por muchas razones pero particularmente porque las acciones que llevaron a mi despido han sido tergiversadas y malinterpretadas por los rumores de internet. Con esto, me gustaría zanjar los rumores.

Al poco de empezar a salir de gira con MCR tuve problemas con un miembro del equipo de gira de la banda que no nombraré. Los problemas fueron muchos, grandes y pequeños, pero algunos de ellos fueron lo suficientemente grandes como para empezar a hacer mella en mi y, por extensión, en mi familia. No supe qué hacer y tomé la que fue la peor decisión de mi vida.

En vez de enfrentarme a los problemas que tenía con el miembro del equipo de un modo abierto y sincero, traté de hacerle pasar por irresponsable. Mi intención era que esta persona quedara como un irresponsable. No tuve intención alguna de beneficiarme. De nuevo, no puedo exagerar mi pobre decisión en esta situación; fue un tremendo error y es uno del que me arrepentiré los años venideros.

Me habría gustado tener la oportunidad de compartir mi parte de la historia con MCR, una oportunidad de expresar mi remordimiento. Nunca me la dieron.

Me gustaría agradecer a los miembros de MCR, equipo y seguidores por darme algunas de mis mejores experiencias musicales de mi vida en los últimos meses. Pese a nuestra corta relación, fue un honor y un sueño hecho realidad con un puñado de individuos con tanto talento. Le deseo a MCR la mejor de las suertes en el futuro y yo espero con ganas mi próximo cometido.

Gracias,
Michael Pedicone.