Hace unos días el candidato republicano a la Casa Blanca, Mitt Romney, confirmaba que su vicepresidente iba a ser el congresista por Wisconsin Paul Ryan. La CNBC le entrevistó el pasado verano y le preguntó lo que tenía en su iPod, a lo que hizo saber que “estaba escuchando a Filter. Escucho grunge.” Además, parece ser que afirmaba ser fan de Rage Against The Machine.
Ante eso, el guitarrista de la banda angelina, Tom Morello, ha querido opinar a través de Rolling Stone:
“El amor de Paul Ryan por la música de Rage Against The Machine es divertido porque él es la personificación de la máquina contra la que nuestra música ha estado rabiando a lo largo de dos décadas. A Charles Manson le encantaban los Beatles pero no los entendía. Al gobernador Chris Christie le encantaba Bruce Springsteen pero no le entendía. Y Paul Ryan no se entera de su banda favorita, Rage Against The Machine. Ryan asegura que le gusta el sonido de Rage pero no las letras. Bueno, me da igual el sonido o las letras de Ryan. Le pueden gustar las bandas que quiera pero su mensaje iluminado de desviar los ingresos públicos aún más radicalmente hacia el 1% es antitético con el mensaje de Rage. Me pregunto cual es la canción favorita de Ryan. ¿Es esa en la que condenamos el genocidio de los nativos americanos? ¿Esa que fustiga el imperialismo americano? ¿O nuestro cover del ‘Fuck The Police’? ¿O es esa en la que llamamos a la gente a apoderarse de los medios de producción? ¡Tantas elecciones para tratar en las convenciones de nuevas generaciones de los republicanos!
No me malinterpretéis, veo que Ryan tiene mucha rabia contenida: una rabia contra las mujeres, rabia contra los inmigrantes, rabia contra los trabajadores, rabia contra los gays, rabia contra los pobres, rabia contra el ambiente. Básicamente lo único contra lo que no se cabrea es la privilegiada élite ante la que se postra por contribuciones para su campaña.
Mirad, los super ricos tienen que racionalizar tener mucho más de lo que podrían gastar nunca mientras millones de niños en EEUU se acuestan hambrientos cada noche. Así que cuando se miran en el espejo, se autoconvencen de que ‘esa gente no lo merece…Son peores’. Algunos de esos tipos de la extrema derecha son más cínicos que Paul Ryan pero él parece creer en este rollo. Esa rabia desenfrenada contra aquellos que menos tienen es una piedra angular del billete Romney-Ryan.
Pero la música de Rage afecta a la gente de manera diferente. Algunas dejan de lado lo que la banda apoya y se concentran en el moshing y pegar codazos en el público. Para otras, Rage ha cambiado su mente y sus vidas. Muchos activistas en todo el mundo, incluyendo los organizadores del movimiento global ‘occupy’ fueron radicalizados por Rage Against The Machine y trabajan incansablemente por un planeta más humano y justo. Quiza Paul Ryan estaba haciendo mosh cuando debería haber estado escuchando.
Espero que Paul Ryan sea un topo. Quizá Rage plantó algunas ideas sensibles en su tarro radical de extrema derecha. Quizá si sale elegido, indulte a Leonard Peltier. Quizá apoye con el ejército a los zapatistas. Quizá llene Guantánamo con empresarios criminales que financian su campaña – y luego los torture con música de Rage 24/7. Es una posibilidad. Pero no me jugaría nada a ello.”