Entendiendo a Axl

Hacer una gira con unos pesos pesados del rock como Metallica y Guns N Roses no sucede todos los días. Y obviamente para un grupo que recién empieza a saborear las mieles del éxito como Avenged Sevenfold es algo digno de comentar.

«Hacer una gira de ese tipo es una de esas cosas, como, follarse una supermodelo y pillar el SIDA o algo,» indica el guitarra Zacky Vengeance a Ultimate-Guitar.com, trazando una escabrosa analogía. «Es como que todo tiene un precio. Es decir, cuando oímos lo de la gira casi lloramos. Son como nuestras dos bandas favoritas de todos los tiempos, joder, y hacer una gira completa siendo Avenged Sevenfold los teloneros principales es maravilloso pero luego vas ahí y es tan…duro.»

Prosigue su compañero a las seis cuerdas Synyster Gates: «Fue probablemente la gira más agitada en la que hayamos estado y por la que hayamos pasado juntos. Tenías como 16 tios contigo, así que cuando llegamos ahí la primera vez teníamos esas literas para 12 personas ¡y éramos 16! Estaba llenísimo. Normalmente pillamos esos buses de dos pisos pero esta vez pillamos uno de una planta y la mitad de las literas estaban en la sala de estar. Las partes de atrás eran la cosa más pequeña que haya visto en mi vida y había una fuga de sulfuro de dióxido o una mierda así, así que casi morimos.»

«Y cuando no estábamos en el bus, estábamos en un avión volando a algún lugar,» recuerda Vengeance. «Cada mañana nos levantábamos a las 3 de la madrugada y cogíamos el bus para poder llegar al avión de las 10 de la mañana. Pillábamos ese bus que conducía durante 6 horas en un roñoso autobus que también olía a sulfuro para poder llegar al aeropuerto y poder volar a algún festival. Luego apareces ahí y tienes que hacer un montón de prensa solo bajarte del avión. Eso es una de las cosas que lleva tocar con Guns N Roses y Metallica, todo el mundo quiere entrevistarte.»

Preguntados sobre su opinión sobre Axl Rose los guitarras se muestran encantados con él. «Axl fue maravilloso, es un tío muy amable, salimos con él y es un tío guay,» cuenta Gates.

«Podemos entender la actitud que tiene con los medios porque es duro estar en este lado de la valla porque te llevas tanta mierda, y tener que estar haciendo prensa todo el tiempo, especialmente para un tío como Axl, de su magnitud. Es decir, me puedo imaginar que se mete en un lío o roce con alguien y de golpe se le convierte en un monstruo que nunca aspiró a ser o que realmente lo sea.»

Añade Vengeance: «Axl es auténtico. No es ninguna broma. Es un buen tipo. Sabes, Axl tiene esas fiestas locas después de los conciertos, donde hay cientos de supermodelos…Es auténtico, tío. Tiene un horario totalmente diferente que cualquier persona. Axl empieza a eso de medianoche. Coge una limusina directa al concierto, da el concierto, se baja del escenario y se queda levantado el resto del día siguiente.»

«Fuimos muy afortunados de poder estar con Axl y también con Sebastian Bach. Estuvimos los tres en el bus viendo las pelis de 'Spiderman'. Fue muy guay. Ese tío (Axl) está siendo totalmente incomprendido.«