Lejos quedan los tiempos en que los rockeros eran vistos como maleantes y enviados del demonio. Sin ir más lejos, en estos tiempos, ya son nombrados hijos predilectos de sus ciudades natales. Es el caso de Sully Erna, frontman de Godsmack, que ha recibido la llave de la ciudad de Lawrence (Massachusetts).
El pasado martes, Nunzio DiMarca, concejal del ayuntamiento, le entregó la llave de la ciudad. DiMarca en su discurso, recordó: «Recuerdo cuando lavaba platos en el restaurante de mi hermano. Siempre fue un joven refinado.»
Erna, por su parte, tremendamente emocionado, declaró: «Siempre habrá un sitio en mi corazón para Lawrence. Me hizo el hombre en que me he convertido.»