Dez Fafara, líder de Devildriver ha charlado con FMQB.com sobre el continuo endurecimiento de su sonido disco tras disco.
«Personalmente es donde siempre he querido ir. Cuando empezamos con la banda todo el mundo sintió nuestra energía y viendo a donde queríamos ir. El segundo disco fue un paso adelante en esa dirección empezando a definirnos a nosotros. Con este, puse pie en tierra y dije, 'No hagas música que no sea real y auténticamente heavy'. Quiero hacer algo que no sea popular ahora mismo con todo ese metal de radio tarareable. Es importante para nosotros hacer algo superior.»
El grupo ha querido experimentar más en este disco, siendo una prueba el tema «Monsters of the Deep». «Si, queríamos hacer algo arenoso y derretido, y teníamos ese riff desde hacía un año. Pensamos, 'Si vamos a hacer una canción así, usemos ese riff'. Pero sin duda que hemos experimentado más. Todo se ha aumentado, especialmente con las guitarras. Hay muchos más solos y los riffs son más complicados. La batería es realmente intensa, los tempos más rápidos. Yo canto de forma más heavy que nunca. Cogí muchas de mis primeras tomas y eso le da la sensación de directo al disco. Jason Suecof y Mark Lewis son unos productores tremendos y han sacado lo mejor de nosotros. Estoy muy feliz con este disco.
Cuando oyes a Devildriver sabes que es Devildriver. Así que, en este disco, queríamos asegurarnos que eso quedaba aún más definido. Si andas escuchando metal todo el día y luego te suena Devildriver en tu iPod o lo que sea, sabrás que somos nosotros. Lo que hacemos con nosotros mismos define lo que hacemos: queremos asegurarnos de que mantenemos nuestro sonido y de que no saltamos a eso que es popular o lo que alguien del grupo esté escuchando en ese momento.
Es el momento ahora mismo de hacernos nuestro hueco porque el mercado metalero está más concurrido que nunca. Hay tantas bandas. Todo aquel que puede gritar está pillando un micrófono ya sepa o no escribir letras, y todo el que sabe tocar algo rápido y heavy lo está haciendo. Es muy importante para cualquier banda que esté por ahí definir su sonido para así poder durar años. Por un lado está bien que haya tantas bandas pero para la escena también puede ser malo. Luego está todo el rollo ese de tener que tener el peinado adecuado y llevar pantalones ajustados. Cuando ya no tiene 20 años ya no piensas en esas mierdas. Haces lo que quieres y si la gente lo sigue, entonces guay.«