Una de las mayores ilusiones de John Pettibone, frontman de Himsa, ha sido aparecer en el veterano programa de la MTV «Headbager's Ball». «Siempre quise salir en 'Headbanger's Ball' porque crecí viendo a Riki Rachtman. Hemos estado ya dos veces en el programa, así que me emocioné mucho.»
Gran aficionado al cine de terror, otra de sus ilusiones es que «Himsa aparezca en la banda sonora de una película de terror.»
Y llevando con una tabla de 'skateboard' desde que tiene uso de razón, Pettibone, también tiene la ilusión de aparecer algún día en la revista Thrasher.
Como último deseo, el frontman querría, algún día, ser telonero de Slayer. «Quedaría saciado,» reconoce.
Espera, sin embargo, que el nuevo disco de su banda, «Summon In Thunder«, le ayude a cumplir alguna de sus ilusiones pendientes.
«Verdaderamente hemos progresado,» indica a la MTV. «Y estamos muy orgullosos de ello. Hemos estado tocando en bandas desde bastante antes de que se formara Himsa (1998) y es una de esas cosas de las que estamos completamente orgullosos de lo que hemos hecho, y hemos llegado a un punto donde tenemos un sonido definitivo…Hemos pasado por todos estos obstáculos, y eso es lo que nos mantiene cuerdos. Hemos tenido giras realmente malas, hemos dormido en el suelo durante años, y esa forma de viajar y esa ética (del trabajo) que siempre hemos mantenido en la banda la que la hace algo un poquito más especial. Hemos visto lo peor y pasado por lo peor, así que cualquier mejora la recibimos con felicidad.»
Puesto a definir el disco, Pettibone lo califica de mezcla de los dos anteriores, «Courting Tragedy» y «Hail Horror«. «Creo que la agresividad del disco sorprenderá a la gente. Hay melodía pero no como antes…Nos hemos mantenido alejados de la dirección que ha ido tomando la escena metal, con bajones tranquilos y voces limpias – no queríamos hacer lo que es popular ahora. Hemos tirado más para el sonido 'thrash' que nos gusta. Crecimos en los 80 con el 'thrash' de la costa este (de San Francisco), pillamos los elementos y fuimos en la dirección contraria al de las escena, y a la gente le está gustando. Así que no me puedo quejar.
Es un disco que aún no estando yo en la banda, diría 'Dios, me encanta estos tíos'. Suena como una banda que seguiría decididamente.
Y sinceramente no hemos cambiado nada aparte de trabajar con un nuevo productor (el gran Devin Townsend). Ha sido genial. Nuestra intención era probar y que luego hiciera todo el disco pero por culpa de su agenda, tuvimos como una semana de tiempo donde pudo meternos en su agenda. Su especialidad son las voces pero yo estaba algo nervioso por trabajar con él porque yo trabajo en un club en Seattle y Strapping Young Lad (la banda de Townsend) siempre tocaba ahí, y veía lo maníaco que se ponía. Pero al minuto de conocerle, nos hicimos amigos.»
El grupo también ha trabajado con Steve Carter, que ya les ayudó con «Courting Tragedy» y con el sueco Tue Madsen, que les produjo «Hail Terror«.
«La combinación de todos nos ha llevado al siguiente nivel. Además hemos tenido más tiempo para trabajar en este disco que antes. Solíamos hacer giras, veníamos a casa, componíamos durante un mes, grabábamos durante otro y luego nos volvíamos a la carretera. Esta vez hemos tenido como un año de descanso. Estuvimos bastante tiempo en casa y los jugos creativos empezaron a brotar. Seattle es una ciudad bastante sombría y gris -incluso su aspecto- y estábamos rodeados por bosques. Ese ambiente juega una gran parte en como componemos.»
Pettibone no escatima elogios para Townsend: «Nunca me he sentido tan cómodo en ninguno de los proyectos que he hecho. Me encantaría volver a trabajar con él. Todos somos grandes fans del trabajo de Devin…Nos encantaría pillarle para que produzca (el próximo) álbum pero veremos qué pasa.
El tema con Devin es que no me presionó. Íbamos haciendo toma tras toma pero él se centra tanto en la pronunciación -y yo nunca había tenido ningún problema con eso, la gente me decía que entendía lo que digo, no como muchas otras bandas que hay por ahí hoy en día. Pero Devin me decía de remarcar más la 'r' en esta palabra o más la 'p' en esa otra, y lentamente me di cuenta de lo que quería, y al final de la semana supe lo que quería.»
Aquellos que adquieran el disco se encontrarán con un DVD extra con el 'making of' del álbum. Una de las partes del documental es la estancia de Pettibone en Vancouver, con Devin Townsend. «Es bastante hilarante -yo y Devin haciendo el idiota en Vancouver, filmando a la gente por la calle. Es bastante divertido.»
Y divertidos son también los dos vídeos que los 'metalcorers' de Seattle han grabado para dos temas del disco: el de «Unleash Carnage» se centra en un partido de tennis inspirado en el film de Wes Anderson «The Royal Tenenbaums» y el del tema «Big Timer» es también curioso. «Somos todos 'sasquatches' (o 'big foots', esa criatura legendaria del folklore norteamericano) que tocamos instrumentos en el bosque. Un amigo nuestro lo hizo usando marionetas. En el vídeo, tenemos que cortar un árbol para hacernos instrumentos y el árbol luego quiere vengarse. Mola bastante.«