El número de febrero de la revista Guitar World incluirá en sus páginas una extensa entrevista con el seis cuerdas de Metallica, Kirk Hammett, donde habla del esperado nuevo disco del cuarteto de San Francisco.

Explica Hammett como decidieron cambiar de productor, tras 16 años trabajando con Bob Rock. «Sabíamos que necesitábamos ir por otro camino. Y parecía que a todo el que le decía que habíamos empezado a componer un nuevo disco, me decá, 'Tenéis que pillar a Rick Rubin'. Y nosotros mismos ya andábamos considerando eso. Conocemos a Rick desde 1986, cuando salió el 'Reign In Blood'. Recuerdo que Rick apareció en el backstage de un concierto en la gira del 'Master Of Puppets' y tenía la cinta original del 'Reign In Blood'. Y nosotros pensamos, 'Uau, tiene el nuevo disco de Slayer. Tenemos que oírlo'. Y recuerdo que tras oírlo, nos quedamos como, 'Hostia puta, esto es lo mejor que hemos oído nunca'. »

Sobre la forma de componer el nuevo material cuenta que «hemos usado una forma que es la misma que con 'St Anger', en el sentido de que estábamos todos juntos y hacíamos jams. Las semillas de las nuevas canciones de este álbum salieron de las jams que hacíamos estando en la carretera, antes de salir al escenario. Tenemos esto llamado 'la habitación para afinar' en nuestros conciertos, que normalmente es una pequeña habitación con una batería, dos amplis para guitarra, uno para bajo, unos altavoces que nunca tiene la potencia suficiente y un Pro-Tools. Uno de nosotros entra con un riff y vamos improvisando sobre él. James (Hetfield) siempre era el primero en estar en la habitación así que solía andar trasteando con un riff cuando nosotros llegábamos.

Y hacíamos esto cada vez que teníamos concierto. Así que, al final de la gira, teníamos como 50 horas de música. Una locura. Lo oímos todo, tratando de reducirlo, lo cual fue un proceso horrible para mi porque pienso que todo lo que tocamos es genial. Así que yo serví de poca ayuda. Dejé que los chicos eligieran los riffs. Una vez todos los riffs principales fueron escogidos, empezamos a hacer jams entorno a ellos para convertirlos en canciones. Tras un año, teníamos 22 canciones. A partir de ahí, lo refinamos.

Rick entró a trabajar con nosotros cuando teníamos esas 22 canciones. Tuvimos muchas reuniones con él. Escuchó las canciones que teníamos compuestas hasta entonces y le gustó lo que oyó. 'Si, seguid trabajando en esas canciones. Seguid mejorándolas'. Así, llegamos a un punto en que votamos las 14 canciones más potentes. A partir de ahí, nos centramos en esas canciones y trabajamos en ellas con Rick. Estuvimos constantemente refinando las canciones de este álbum, incluso cuando estábamos grabando las pistas de batería seguíamos haciéndolo.«