Cuando Earth Crisis, una de las bandas impulsoras del hardcore 'straight edge', defensores a ultranza de los derechos de los animales y cuyos miembros son veganos, se separaron en 2001, emplearon su tiempo en otras actividades (el frontman Karl Buechner se concentró en Freya, su otra banda) pero sabían que tarde o temprano volverían a juntarse.
«Nunca nos vi como una banda política porque la gente da por hecho cuando eres una banda política que eres de derechas o de izquierdas – pero nosotros siempre hemos venido de nuestra dirección, de un lugar más espiritual,» explica a MTV.com el frontman. «Personalmente, no estoy demasiado impresionado por ningún partido político en EEUU ahora mismo. Da la sensación de que hay muchas soluciones simples y ninguna de las partes parece saber encontrarlas.»
«Nuestro mensaje, (centrado en temas como la protección al medio ambiente, los derechos humanos, los derechos de los animales y la sobriedad)» prosigue Buechner, «es uno que toda la gente puede apoyar, sin que importe la religión que sigan o con qué lado del espectro político se asocie.»
Lo que los fans esperan como agua de mayo es un disco con material nuevo. El deseo será concedido ya que los de New York ya trabajan en él. «Tenemos seis canciones compuestas y con suerte las grabaremos este año. Tocaremos algunas de ellas en la gira que haremos (con Sworn Enemy, Shai Hulud, Terror, Down to Nothing y Recon). La gente me pregunta como suenan las canciones y la mejor forma de describirlas es como una mezcla de 'Destroying The Machines' (1996) y 'Breed The Killers'. Estilísticamente son como canciones de esos álbums.»
La gira y el volver a los escenarios servirá para reencontrarse con viejos amigos (ya sea de bandas o gente que iba a verlos años atrás y que ahora ya tienen otras responsabilidades en su vida) sirve de acicate para el grupo. «Hemos desarrollado algunas amistades genuinas con las bandas con las que hemos girado y la gente con la que estuvimos – escenarios en los que tocamos año si, año también. Ahora, mucha de esa gente que veremos son padres o madres o tienen un trabajo normal – gente que nos manda e-mails diciéndonos que están flipados por venir a vernos. Creo que será divertido.»
No tiene tan claro que las nuevas generaciones vayan a recibirles con los brazos abiertos aunque si espera que miembros de bandas que actualmente son importantes en la escena si lo hagan. «Nuestra meta como banda es componer canciones que atrajeran nuestro gusto musical, y muchas otras bandas, en cierta medida, tomarán elementos de grupos que les inspiraran y las fusionan en un sonido único. Ciertas bandas sonarán similares a aquellas que escucharon mientras crecían y eso es casi inevitable. Nuestras metas son las mismas que en 2001. Con suerte haremos felices a nuestros antiguos fans y que algunos chavales jóvenes abracen algunas de nuestras ideas. »
Y pese a reconocer que la escena 'hardcore' no está en un momento demasiado bueno, Buechner asegura que si se busca bien, aún se pueden encontrar buenas bandas. «Hay mucho hardcore de calidad ahí fuera pero muchos sellos grandes no apoyan ni amamantan a las auténticas bandas de hardcore. Simplemente van a lo que se vende fácil, aquello que escandalice, con esos tíos que se disfrazan y cuya música es pop -todo aquello que pueda venderse a los chavales de 14 – 16 años. El hardcore nos juntó, nos enseñó un código ético y nos dio una escena – un grupo de amigos con los que unirnos y con los que conseguir cosas. Quiero que seamos capaces de amamantar eso.
El hardcore durará para siempre pero no es algo de moda y nunca podrá serlo porque es genuino, es sustancial. ¿Qué venderá más? ¿Discos con una 'X' en la portada (la 'X' es el símbolo del 'straight edge') o un CD con un pentagrama invertido o una hoja de maría? Me parece bastante obvio.«