Resulta increíble la enorme capacidad que tiene Gran Bretaña para generar multitud de bandas de incuestionable calidad en lo últimos tiempos. De hecho, me atrevería a decir que en la actualidad la escena rockera en las islas británicas resulta mucho más sugerente que la todopoderosa americana. En la ultima década, la relación cantidad/calidad se decanta muy favorablemente del lado británico, y según avanzamos no parece que esta realidad vaya a cambiar. Quizá el afán inglés por crear y destruir fenómenos musicales en cuestión de meses, sea el factor más negativo de un país en el que cualquier grupo con buenas ideas y ganas, todavía hoy puede acceder a innumerables oportunidades dentro del mercado discográfico y musical con muchas garantías.
Slaves To Gravity no son unos recién llegados, ni mucho menos, al negocio musical; de hecho, antes de comenzar este proyecto, 3 de los músicos de esta banda lo intentaron con otra formación de similar estilo, The Ga Gas. Las circunstancias no permitieron al grupo llegar muy lejos, a pesar de que su debut contenía una muy buena colección de canciones de espiritu ‘hard rock’ y ‘grunge’, que miraban muy de cerca al sonido de aquellos magníficos Sondgarden de la primera mitad de los 90.
Tras este primer intento fallido, Tommy Gleson, Toshi Ogawa y Jason Thomopoulos, junto a la nueva incorporación de Mark Verney regresan con mayor fuerza, convicción e ideas muy claras sobre el camino y sonido que deben seguir con Slaves To Gravity. Una banda que partiendo del sonido que ya apuntaron con The Ga Gas aún son capaces de pulir y definir aún más su estilo.
De lo que son capaces ya dieron muestras en el primer single que lanzaban el año pasado como adelanto, «Big Red», un tema de indudable potencial que nos retrotrae a los Soundgarden de la etapa «SuperUnknown«, y que permitió a la banda un buen número de actuaciones en vivo a lo largo de las islas británicas con bastante más expectación en Inglaterra de la que hubieran imaginado.
Hace unas semanas veía la luz definitivamente «Scatter The Crow«. Su esperado álbum, que comienzan a promocionar inicialmente con el single «Mr. Regulador», tema que definitivamente los esta haciendo explotar a nivel masivo. No seria de extrañar que este disco alcance unas muy altas cotas de popularidad porque ingenio y calidad no faltan en este trabajo.
El enorme potencial que muestra T. Gleson, un cantante de gran personalidad, cuyo registro recuerda extremadamente al del mejor Chris Cornell, y que además es capaz de tocar la guitarra con bastante acierto son una de las bazas principales del grupo, que sumadas a las efectivas composiciones, todas ellas sumamente cercanas al sonido que Soundgarden nos ofrecieron en su etapa más exitosa («Superunknown» / «Down On The Upside«) acaban por dar lugar a un disco realmente efectivo. Y es que con temas con tanta alma como los antes mencionados «Mr. Regulador», «Big Red», «Meantime» u otros no menos inspirados como «Heaven Is A Lie» o «Gutterfly» resulta muy difícil no rendirse a un grupo que se ha autoimpuesto un nivel muy alto con este magnifico Scatter The Crow, y que tiene por delante un brillante y sobre todo esperanzador futuro. Desde ahora, seguramente uno de los más destacados discos de este 2008.