Todos tenemos debilidades, pequeñas preferencias, bandas, discos que aunque no vayan a cambiar el rumbo de un género te enganchan, te atrapan y no puedes dejar de escucharlos.
Seguramente cada año aparecen uno o dos discos con estos requisitos, discos que sabes te van a acompañar una larga temporada y con los que vas a disfrutar al máximo.
Uno de estos singulares trabajos es Out Of the Light Into The Night y nos llega por obra y gracia de los no menos singulares Black Sonic Prophets, un cuarteto de Liechtenstein (un pequeño principado Centroeuropeo situado cerca de Francia, Alemania y Austria), que grabó y autoeditó este álbum en 2006 y que desde entonces su actividad musical no ha dejado de crecer.
Varias giras como teloneros de bandas tan consagradas como los ‘nu-metaleros’ italianos Exilia o los existosos Stone Sour, les han permitido acceder al gran público, un público que gracias al boca a boca ha ido extendiendo a lo largo y ancho de toda Europa, excelentes críticas y comentarios sobre la banda.
Como decía, Black Sonic Prophets son una banda singular, y lo son por varios motivos, aunque es musicalmente donde se nota, a pesar de las varias comparaciones que podamos establecer entre ellos y algunos de los grandes referentes dentro del rock alternativo o incluso el hard rock actual.
Han tenido la enorme virtud de saber aprender porque estos chicos no copian. Han sabido asimilar con bastante acierto las enseñanzas de bandas tan dispares como Metallica o Nickelback y al final han conseguido un disco que cumple a la perfección con lo que se puede esperar de una banda con este perfil.
En esta ocasión no voy a desgranar el disco tema por tema; de hecho no encontrareis aquí hits ni temas que vayan a sonar en las radios. Un detalle que se agradece. Este es un trabajo en el que no sobran canciones, donde no hay temas de relleno o canciones de medio pelo. Un ejercicio de hard rock donde las influencias del grunge (o post-grunge) están muy presentes, sobre todo en la angustiosa temática de sus letras, donde siguen la estela de los últimos Alter Bridge (y eso que este álbum fue registrado con anterioridad a Blackbird), empecinados en construir murallas de guitarras recias y potentes, que combinan acertadamente con estructuras más melódicas y algunos solos que pueden recordarnos incluso a los primeros Velvet Revolver.
Quizá algunos acusen o quieran buscar las cosquillas a este trabajo en la amoldable personalidad de los músicos y su resultado, pero este disco tiene canciones como la copa de un pino. Sin duda tienen madera y aunque habrá que exigir algo más en próximas entregas, este debut es de los que te hace abrir los ojos, prestar atención y depositar tu confianza en una banda.
Por cierto, no tardará mucho en aparecer la secuela a este magnifico Out Of the Light Into The Night: en su Myspace ya aparecen un par de temas nuevos de este año. Me pregunto cuantos más incluirán a estos 12 temas que forman parte este álbum, entre sus favoritos al final de este año. Al menos yo seré uno de ellos.