Ha reconocido Corey Taylor a The Age que los conciertos de Slipknot son auténticos ejercicios de resistencia física. «No hay duda de que te acaba pasando factura al cuerpo y a la mente al poco tiempo. Esto no son simplemente cuatro tíos saltando en ropa de calle. Esto es una producción, una batalla y una celebración. Hay tantos modos de enfocarlo, que muchas veces puedes acabar perdido. Realmente nos apoyamos unos en otros. Si uno de nosotros tiene un mal día, lo sabemos. Decimos, 'Tíos, esta noche os necesito'. Y te ayudan.»
Si bien a priori por imagen el grupo podría causar la impresión de mandar un mensaje pesimista, Taylor considera que es todo lo contrario. «Siempre he tratado de mezclar la oscuridad con grandes dosis de positivismo. Con nuestra imagen oscura, obviamente se pierde algo. Pero para mi la cosa siempre se ha centrado en darle a la gente una razón para vivir más que para abandonar.»
Sobre el concepto general del grupo asegura que «obviamente hay un género de rock teatral pero para nosotros no deja de ser una parte del puzzle. Siempre nos hemos centrado en el contenido y porqué nos vestimos como nos vestimos. Hay mucho más de arte que de provocación. Kiss y Alice Cooper rompieron muchas barreras pero nosotros somos diferentes a ellos. Siempre he tenido la sensación de que nosotros éramos como si Pink Floyd montara una banda de metal. Dudo que veáis a Slipknot sacando cereales – Kiss se han convertido en la Disney del rock.«