El que fuese cantante de Pantera, actualmente centrado principalmente en Down, Phil Anselmo, se ha confesado para Antiquiet, asegurando que es «debatible» que si sus desavenencias con Vinnie Paul y Dimebag Darrell no se hubiesen aireado a través de la prensa las cosas habrían acabado de otra forma entre ellos. «Pero eso sería hablar en términos imaginarios,» reconoce.
«Pero si hablas de qué hubiera pasado si, teóricamente, si. Rex (Brown, bajista) y yo hablamos mucho sobre ello y sabemos…Pantera podría haber seguido adelante. La entrevista que suscitó la imaginación de todo el mundo…Poca gente sabe que el tipo que me preguntó aquello -se suponía que era 'off the record'- me preguntó directamente qué pasaría si nos peleáramos de forma física. Primero de todo, eso nunca habría pasado. Segundo, y nuevamente, teóricamente, yo tendría ventaja sobre ellos. Así que lo puse de un modo que lo hacen un millón de hijos de puta a diario -boxeadores, etcétera-, sabes, que van a hacerles cosas terribles al adversario y luego, una vez se aclara todo, se dan la mano y se abraza, y se acabó. Pero las cosas se ponen en plan absoluto, todo es blanco o negro, se lee y así se interpreta, y desafortunadamente se hizo así. Porque, como dije, Pantera era algo muy poderoso.
Y no solo echo de menos esos días, y a Dimebag y a Vinnie, y todo el equipo, y todas aquellas sensaciones, y el orgullo que había detrás de eso, y la validez que había detrás de eso…Como he dicho antes, Rex y yo…Siempre decíamos que tendríamos que habernos metido en una habitación todos juntos para discutir y gritarnos…Y muchas cosas serían culpa mía pero en aquellos tiempos era un pato herido. Necesitaba una operación en la espalda con tanta necesidad, que era patético. Y yo eh…He hecho algunas malas elecciones.»
En los últimos tiempos se viene rumoreando que Anselmo ha vuelto a recaer en su adicción a las drogas. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Lo aclara el vocalista. «No había oído que había vuelto a las drogas; es una jodida ridiculez. Es una estupidez del carajo. Pero a la mierda todo el mundo, en serio, yo vivo mi vida y hago exactamente lo que me sale de la polla…No ando por ahí tratando de impresionar a nadie, me la trae floja, tío. Y la gente…Mira, he sido…Gay, me rompí el cuello de saltar al público desde el escenario, he sido de todo: un satanista, un defensor de la supremacía blanca…
Pero te digo que soy más fuerte que cualquier puto tío de mi edad. Y no bebo. Es simplemente que, después de la operación de espalda, nunca sabes, un día es un buen día -joder, puedes llegar a tener una buena semana- y luego, hay un cambio de tiempo o alguna mierda de esas, y puedes pasar por tal dolor. Dolor, dolor, sabes, es…Yo y el dolor somos íntimos. Pero con terapia física, y el yoga y el Pilates, y toda esa mierda (he conseguido) hacer tolerable el dolor. Apartes esa mierda. Te levantas con un par de cojones y -cada día- te reservas treinta minutos y estiras esa mierda y te cambia todo el puto día.
Ahora mismo solo tomo una droga y se llama Lyrica. Y lo que hace es que es una medicina antimigrañas. Y hay mucha gente que toma esta droga, los que tienen dolores por la ciática o dolor como el que tengo, que es ciática pero después de una cirugía, cuando los nervios reconectan, se reconectan erróneamente. Y ese viene siendo mi caso. Es tres veces al día y estoy cansado de esa mierda. Estoy cansado de toda esta mierda. Pero ayuda, sofocar el dolor, un poquito solo. Siempre puedes notarlo, tengo el pie izquierdo algo atontado desde la cirugía. Pero el estirar y eso hace que circule la sangre, y que la sangre circule es jodidamente importante. Y también boxeo como diez rondas al día cuando estoy en casa, dándole al saco, y trabajando en cosas. Así que…Uno no puede hacer esa clase de cosas cuando está hasta arriba de drogas o mierda. Así que, que sepan los que van diciendo que no es así, que se pongan en mi puto lugar. Estarán sudando y diciendo que abandonan a los diez minutos de mis ejercicios. Las cosas van mucho mejor. Puedo decir -directamente tras la cirugía- que el médico arregló lo que me había estado matando durante tanto tiempo. Tres vértebras eotas, ¿sabes? Así que, aquí estoy con titanio en mi espalda, contándote que canto más trabajo hagas, mejor te sentirás. De cualquier forma, siguen habiendo pasado tres años, y es una cosa de ir día a día. Realmente es así. Sabes, un cambio de tiempo, un aumento de la presión, solo Dios lo sabe. Sabes, eso es lo duro.«