El 21 de julio los canadienses Our Lady Peace vuelven a la actualidad con un disco que supone una vuelta a los orígenes del grupo. «Burn Burn» ha sido totalmente autoproducido por la banda y ve como el cuarteto deja de lado el sonido más limpio y cristalino de sus últimos discos para volver a la distorsión y la inmediatez.
«Queríamos hacer que estas canciones sonaran maravillosamente simplemente tocando nosotros cuatro, sin añadir nada más,» explica el frontman Raine Maida a Alternative Addiction. «Hay un poquito de piano aquí y allá y alguna pista doblada pero la base del disco es rock and roll auténtico con batería, guitarra y bajo.»
El sonido del grupo ha ido evolucionando a lo largo de los años debido a multitud de influencias, reconoce el vocalista pero pese a ello, guarda un cariño especial por el debut discográfico que editaron en 1995, «Naveed«. «Fui realmente cabezón en nuestro primer disco, 'Naveed'. Recuerdo haber dicho, 'somos una banda de rock, no quiero oír un piano, un sintetizador ni siquiera una pandereta'. Realmente estábamos muy centrados y eso lo mantuvo simple en el estudio, y realmente me encanta ese disco por su simplicidad. Y este disco es un regreso a aquella cabezonería.»
El regreso a ese sonido inicial parece la reacción lógica a los acontecimientos ocurridos en el grupo en los tiempos recientes, siendo uno de los puntos álgidos, la salida de Sony Music, el sello con el que llevaban desde sus inicios. «A nivel persona, creo que nos ha ayudado,» asegura el vocalista refiriéndose al tiempo que han estado separados desde «Healthy In Paranoid Times» y este su nuevo disco. «Necesitábamos ese parón para expulsar nuestros demonios.»
Y es que las sesiones de grabación de ese anterior disco estuvieron cerca de terminar con el grupo. «El ultimo disco que hicimos con Bob (Rock, productor), nos llevó tanto tiempo hacerlo y fue tan tumultuoso, grabamos tantas canciones, y la banda casi se separa. Esta fue una de las primeras veces en la carrera de Our Lady Peace que el sello fue capaz de entrometerse en lo que estaba haciendo Our Lady Peace. Nunca antes lo habíamos permitido pero pasó en 'Healthy In Paranoid Times'.»
Fue en la gira de ese disco en la que Maida entendió quien es realmente importante en el mundo de la música: los fans. «Te empiezas a dar cuenta de que la industria no significa nada, los sellos discográficos y toda esa otra mierda, lo que importa es la integridad de la banda y como conecta con los fans y la música. Una vez te das cuenta de que lo que importa son los fans y nosotros cuatro, todo vuelve a estar genial. Nos hizo falta salir de nosotros mismos y reconectar con los fans para darnos cuenta de eso.»
El hecho de no seguir bajo contrato de una discográfica ha permitido al grupo tomarse su tiempo a la hora de grabar el álbum. «Cada cosa que grabábamos que sonara forzada o que sonara como que intentábamos forzar algo, aún si veces sonaba bien, no lo pusimos en este disco. Estábamos en un punto en el que podíamos tomarnos nuestro tiempo y asegurarnos que el disco no tenía ninguna canción de esa clase.»
El resultado del disco es algo de lo que están orgullosos. «Hay mucha integridad en este disco, creo que de todo lo que es Our Lady Peace, hemos cogido lo mejor y hemos hecho un disco completo.»
El hecho de que Maida tenga un estudio en casa facilitará que en el futuro tengamos material del grupo con mayor frecuencia o al menos de otro modo. «Veremos como va, quizá no sacas discos en unos años, quizá solo canciones o EPs. Simplemente me hace feliz el hecho de poder tener el poder de hacer discos de verdad cuando queramos.»
El regreso al sonido primigenio también significa un nuevo enfoque para sus giras: nada de pabellones, vuelven a pequeñas salas. «Ya nos han ofrecido algunas giras (grandes) y hemos rechazado algunas cosas porque ahora mismo queremos hacer nuestros propios conciertos y conectar con nuestros fieles fans.«