Presencias inspiradoras

Nos pone Sunburn sobre la pista de la entrevista que Luis Carlos Maldonado, frontman de Into The Presence, ha concedido a RockWired.com.

«Estoy contento de que finalmente haya salido (el álbum),» confiesa. «Para ser sincero, empezamos con el disco hace casi 3 años. Nos llevó un año hacerlo porque Tim (Alexander, batería) andaba haciendo algunas cosas con Primus y un par de otras cosas. Yo también toco con un montón de artistas diferentes y estaba de gira por aquí y por allá, y encontrar tiempo para poder hacer el álbum nos llevó un año. Cuando finalmente pudimos terminarlo, las cosas empezaron a moverse. Conseguimos manager y un agente de giras al igual que un sello. Odio decir esto pero parecía que todo nos venía de cara pero de alguna manera así fue. Fue muy interesante ver como todo eso se iba desplegando. Conocimos a Michael Kaplan que en ese momento era vicepresidente y cazatalentos de Razor And Tie. Michael es un tipo genial así que firmamos por Razor And Tie. Ahora estoy listo para hacer cualquier cosa. Estamos listos para trabajar.»

La experiencia ha sido gratificante y el no haber encontrado demasiados obstáculos ha hecho que Into The Presence haya pasado a tener una importancia prioritaria de entre los distintos proyectos de sus componentes. «Todo el objetivo de este proyecto era hacer de él el punto principal de nuestras vidas. Lo he pasado genial y he tenido una carrera genial haciendo sesiones y trabajando para muchos artistas diferentes pero llega un momento en el que quieres crear y verlo crecer. Es diferente de cuando estás trabajando con alguien como John Waite y no hay nada de malo en ello. Es música y es su carrera y siempre será así. Yo también soy compositor y sé que Tim es también muy creativo y ambos teníamos una visión y queríamos avanzar con algo nuestro. Es algo muy natural hacer eso.»

Maldonado explica el origen del nombre de la banda. «El nombre viene de experiencias que tuvimos en el estudio. Grabamos el álbum en un sitio llamado Jerome, Arizona, que es un pueblo fantasma. No habrá más de trescientas personas viviendo ahí pero fue oficialmente un pueblo fantasma durante mucho tiempo. Mucha gente tiene toda clase de historias sobre fantasmas y experiencias. Mientras estábamos grabando en el estudio, tuvimos un número de experiencias. Fueran las que fueran, fue interesante y nos afectaron en lo que estábamos haciendo y a nuestras mentes y lo abiertos que estábamos a esas cosas. Siempre teníamos la impresión de qe había una presencia a nuestro alrededor. Teníamos un técnico que estaba trabajando con todo nuestro material y una noche, en el estudio -que está en un instituto abandonado- y a la noche siguiente cuando le fuimos a buscar para desayunar estaba como flipando. Nos miró y dijo, '¿Vosotros creéis en fantasmas?' Y le dijimos, 'Claro, ¿por qué?' Nos dijo que le costó dormir durante toda la noche porque estaba siendo molestado por lo que percibía como hasta cinco presencias diferentes. Una encima suyo mientras las otras le iban animando. Más tarde, nos enteramos que muchos años atrás, hubo una epidemia que afectó el área, allá por 1920. Nuestro estudio estaba situado en lo que solía ser el despacho del director y justo al lado estaba lo que solía ser la oficina de enfermeras y en ese cuarto, cinco estudiantes murieron de lo que fuese aquella epidemia. Era interesante y extraño a la vez. Siempre sentíamos que algo estaba pasando. Teníamos botellas de agua y una de ellas se congelaba y las otras estaba bien. Iban pasando muchas cosas interesantes. Fue mi idea después de toda esa expericnai el llamar la banda Presence y el resto de la banda sugirió que la llamáramos Into The Presence. »

El músico habla de sus compañeros de banda: «Tim Alexander -que toca la batería- y yo somos los fundadores de la banda. Es nuestra visión. Tim ha trabajado con bandas como Primus y A Perfect Circle y otra gente. Es un gran productor y un gran batería. Tiene mucha creatividad y visión y eso es lo que aporta. Yo compongo mucho material y como compositor uno puede seguir y seguir componiendo y componiendo y componiendo. Pero cuando los dos nos juntamos, la habilidad de Tim para sacar lo mejor del material y dirigir el barco en una cierta dirección es muy buena. Las sesiones fueron muy centradas y ambos tuvimos ideas de como queríamos que todo sonara. Creo que lo alcanzamos en este disco. Él es muy bueno dirigiendo y sacando lo mejor de nuestra música. Piensa de forma poco convencional por lo que pudimos salir del reino del verso/estribillo/verso/estribillo. Hubieron dos hermanas que tocaron en el álbum – Ana y Paz Lenchantin. Paz conocía a Tim de trabajar con A Perfect Circle y Ana conocía a Tim de otra banda. La mayoría de nosotros somos de San Francisco y nos conocemos de muchos años. Conozco a Tim desde hace por lo menos 15 años. Paz tocó el bajo y aportó su sonido único. Muchos bajistas habrían venido y tocado la nota original pero Paz vino y añadió algunas partes únicas a la canción para darle un nivel diferente. Su forma de tocar le dio a la canción una atmósfera diferente más que ser solo un músico de apoyo. Le dio una contraparte a la música. Fue casi como orquestal, el modo en que esto salió. Cada parte estaba haciendo algo distinto pero todo encajaba y no se aplastaban mutuamente. Ana tocó el chelo en el disco. El ambiente musical que le añadió, especialmente en la canción 'My Only Crime', es dinámico y bonito. Los instrumentos de cuerda son clave en esa canción y es lo que le dio el tono y ambiente. Saca una emoción dentro de ti.»

Puestos a elegir temas favoritos, Maldonado, se quedaría con «'Lovers' y 'My Only Crime'. 'Lovers' porque es una canción dinámica con todas las partes implicadas y 'My Only Crime' porque es pura emoción lo que se logró capturar. Grabamos el álbum en un formato de dos pulgadas analógico por lo que no hubo nada digital. No hubo cortes ni pegamos nada no nada de auto-afinación. Este disco es una documentación honesta de lo que pasó en el estudio.»

Al respecto de como componen, explica que «normalmente vengo con un puñado de ideas. Normalmente, entro sabiendo que la idea puede ser cambiada por lo que no soy uno de esos tipos que viene diciendo, 'Esta es la canción y esto es lo que vamos a hacer'. Tim y yo nos juntamos no hace mucho para componer para el segundo álbum. Yo aporto algunas ideas, él aporta algunas. A ambos nos encanta escuchar música clásica y os gusta escuchar rock y nos gusta hacer cosas que no sean tan estandard. Cuando tenemos una idea para una canción, empezamos a trabajar. Normalmente yo traigo la línea de la melodía y los cambios de acordes. Tim guía la canción en términos de ritmo y quita algunas cosas o me pide añadir algo en alguna parte en particular. Estamos constantemente retándonos. Es una colaboración única. No le ponemos límites a nada.«