Trent Reznor ha explicado a Inquirer.net los motivos por los que va a dejar de lado los conciertos en vivo y centrará sus miras en la composición y grabación en el estudio.
«Lo que vine a querer decir es que NIN como una banda de giras o de directo que está todo el día en la carretera se ha acabado. He llegado a un punto en el que…Ha invadido cada otro aspecto de mi vida. Además, pienso que creativamente, será mejor invertido en otras cosas que pueden ser NIN o fuera de NIN. Algunas de esas cosas quizá sean colaboraciones. Tengo un número de proyectos que no están relacionados con la música que he ido dejando aparcados durante mucho tiempo…»
Le preguntan como consigue mantener la pasión para cantar los temas de un álbum como «The Downward Spiral«, que supusieron sacar a la luz sus demonios interiores. «Quizá no sea el mismo tipo que era entonces pero durante los cinco minutos de esa canción, y probablemente una hora después, se apodera. No se trata de fingir ni actuar, sino que te conviertes – me sigue llevando las mismas cosas que me llevaron a componerla en su momento…Lo escribí como una forma catártica de sacarlo de mi, casi como una terapia, y entonces, al salir de gira, me pasé a las drogas y el alcohol y la canción se derramó y se convirtió en mi…Ahora, cuando no estoy en el escenario, no soy el mismo tipo que en el escenario pero me motiva lo mismo. No me gustaría ser como Gene Simmons (de Kiss), un viejo que se maquilla para divertir a los niños, como un payaso que va a trabajar…En mi paranoia, tengo miedo de que si no paro esto, puede convertirse en eso. Porque es bonito cobrar a fin de mes y la única forma de conseguir eso es tocar en directo así que tengo todas esas cosas rondándome la cabeza.»
Ahora que no tiene planes de salir a la carretera durante largo tiempo, ¿cambiará su opinión sobre la industria discográfica? Nada más lejos de la realidad: «Es una industria dirigida como si fuese la Mafia…Durante años se han aprovechado de los artistas empezando por The Beatles. Tu (el artista) haces todo el trabajo, ellos te prestan dinero para hacer discos, luego se lo devuelves y se quedan con todo. Ver como se hunde ese sistema es excitante. No hay una respuesta clara sobre qué es lo adecuado, y como artista te enfrentas a un escenario bastante difícil: la mayoría de chavales consideran que está bien robar música, y hacerlo libremente…La buena noticia es que la gente está emocionada e interesada en la música…
Como artista, es tu trabajo capitalizar eso. Eso, generalmente, significa, tragarte una pastilla amarga y decir, 'Hey, la gente no quiere comprar música, así que dejadme que os la dé. Encontraré otra forma de hacer dinero pero os quiero de mi lado y escuchando mi música. Deshagámonos de este jardín tapiado de tener que pagar para oír (la música), aquí lo tenéis, dádselo a vuestros amigos. Hey, tratad de venir a nuestro conciertos, si podéis, o podéis comprar esta camiseta nuestra si os gusta. y eso nos ayudará. O aquí tenéis una bonita edición de nuestro álbum con una bonita presentación y un buen precio y solo vendemos un par de miles.
Siempre hay formas de poder hacer más efectivo tu negocio pero el modo tradicional de irte a tu tienda de discos y pagar por ello, esos días han pasado. En EEUU, ya no quedan tiendas de discos. El único sitio que queda…Es algo como Best Buy donde vas a comprar una lavadora y hay un pequeño estante de DVDs y CDs. Creo que ahora mismo estamos justo en medio de dos modelos de negocio…
Trato de hacer todo lo posible para contribuir para que cuando el próximo modelo surja, sea el que sea, sea con suscripción o lo que sea, donde el artista esté más justamente representado y tenga voz y sea compensado, y no pagues los aviones privados de los jefazos de los sellos discográficos. Están con los últimos estertores y yo feliz de verlo porque son todos unos ladrones y unos mentirosos.«