La Metal Hammer (en su edición inglesa) incluye este mes una entrevista en profundidad con Jerry Cantrell y William DuVall de Alice In Chains con los que hablan del oscuro pasado del grupo.
Cantrell explica que no fue solo el vocalista Layne Staley quien cayó en las redes de las drogas: «No solo era él, todos estábamos jodidos. No es que dijéramos, 'Si, buuuu, heroína'. Si, tío, era oscuro. Esa era nuestra vida.» En cualquier caso, el guitarrista lamenta la mala fama ganada por Layne: «Con Layne es muy fácil decir, 'Yonqui, muerto'. Pero era mucho más que eso y nosotros tuvimos la suerte suficiente para conocer el resto de él.»
DuVall es cuestionado sobre sustituir a Staley: «Nadie quiere mancillar ningún legado ni faltar al respeto a Layne. Quiero a Layne, me encanta su trabajo. La única manera de honrar el pasado y el presente es hacer lo tuyo pero de un modo en que, con suerte, sea un poco más optimista en lugar de una nueva visita al viaje de la muerte. Trata de la redención y renacimiento y para mi se trata de apropiármelo a mi manera porque si no no tendría utilidad ni para mi ni para la gente que se preocupa por esta banda y por Layne.»
En otro orden de cosas, el grupo se pasó el pasado 19 de septiembre por los estudios de la Q101 de Chicago, donde fueron entrevistados. Preguntaos sobre la filtración del disco a la red 10 días antes de su lanzamiento oficial, el batería Sean Kinney confesó que «sabes que ocurrirá porque (es lo que pasa hoy día) pero solo esperas que no pase con demasiado tiempo de antelación. No es algo que le pase solo a esta banda pero no lo habíamos sufrido antes porque no habíamos hecho un disco en más de 14 años por lo que pienso que es el 'shock' inicial. Es en plan, '¿Como?' Antes lo andábamos comentando…Es como ir a prisión – sabes que te van a violar pero no estás preparado para ello. Piensas que estás preparado pero no estás realmente preparado para lo violenta que es esa violación. Es como, ¡Guau, me lo está dando todo'.«