El guitarrista de The Dillinger Escape Plan, Ben Weinman, ha charlado con la web de fans del escritor Chuck Palahniuk, sobre la situación de la industria discográfica.
«Creo que hay sitio para el sistema tradicional de los sellos (discográficos) pero es más una cosa económica, no es algo del arte. Creo que hay diferencia entre el arte y la insiración y la cultura pop, y a veces se cruzan, pero…Creo que siempre habrá las maneras tradicionales de una multinacional. Creo que siempre habrá lugar para eso en lo que respecta a las 'boy bands' que necesitan salir en posters, la tele y esas cosas. Pero creo que el contrato, el antiguo modelo, está obviamente muerto para los artistas.»
El guitarrista es también el manager del grupo: «Es una decisión artística y económica. No miento respecto a que pese a que no creamos música que es necesariamente comercialmente viable, esto sigue siendo un negocio. Obviamente, artísticamente no queremos que un gilipollas que no pega ni golpe nos diga como hacer las cosas pero en el plano económico no tiene sentido a no ser que esa persona logre, al menos, doblar tus ingresos. De otro modo, simplemente te están quitando dinero. Y en este punto, esta banda ya tiene su propia entidad. De algún modo existimos independientemente de lo que ocurra (ahí fuera). Conozco bandas el doble de grandes que nosotros que no hacen tanto dinero como nosotros. No entiendo donde fallamos porque hacemos las cosas totalmente distintas.»
En cuanto a las descargas «ilegales» confiesa que «probablemente nos ha beneficiado y perjudicado. Creo que la gente se equivoca al pensar que tenemos un problema con la era digital porque hablamos de que la tecnología se interpone en el camino. La verdad es, en nuestra opinión, que las descargas ayuda a bandas como la nuestra. Cuando aparecemos en un playlist, trabajamos duramente para que la gente, les guste o no, sepan exactamente lo que somos. Es esa banda. Cuando nos ven en directo, sabes, desde kilometros (sepan) que – son Dillinger tocando. De hecho, leí en un blog el otro día de como un tipo le preguntó a su sobrino qué bandas le gustaban y le dijo que The Dillinger Escape Plan y no podía decirle quien más porque solo le gustaban las canciones (y no el grupo). Y me enorgullecí. Pese a que sabía que probablemente se descargó todos nuestros discos gratuitamente, el hecho de que supiera quienes somos, que teníamos una identidad y el resto de cosas solo fuesen canciones, eso me dijo que estamos haciendo algo bien.»
Con su visión del mercado, su amistad con Trent Reznor no extraña. «Le tengo en mi agenda telefónica, ¿sabes? Esta vida es de locos. Se casó y se ha tomado un descanso y finalmente ha dicho, 'No tengo que hacer nada con Nine Inch Nails si no quiero. Controlo mi vida y no me define esta banda'. Me puedo indetificar con eso. Obviamente Dillinger no se acerca ni de lejos a Nine Inch Nails pero llevo en esta banda trece años y es importante para alguien la posibilidad de parar y tomar las riendas de su vida. Creo que ahora mismo es momeno para que la gente que le importa le deje y pueda hacer lo que quiera. Ya sabrá encontrarnos cuando nos necesite y nunca ha tenido problemas con eso. Pero no me siento cada noche a llamarle para hablar sobre 'Lost'.»
En cuanto a los pasados rifirrafes que han tenido con bandas como Disturbed o Avenged Sevenfold, comenta que «se supone que no tenían que ser piques. No era lo que buscábamos…Vimos cosas negativas en ello, vimos cosas positivias (como publicidad gratuita de bandas mucho más grandes que nosotros). Nunca ha sido un tema de madurez, ha sido un tema de que no pensábamos que fuésemos a importar un carajo a bandas como esas. Si alguien nos pregunta y nosotros contestamos sinceramente y estas bandas se cabrean, es difícil discutir eso. La verdad es que hay muchas bandas que no nos gustan (musicalmente), con las que terminamos siendo grandes amigos. El hecho que tengamos similares estilos de vida y pasiones (ayuda). El hecho de hacer lo mismo y tener la misma clase de problemas en nuestras vidas…Tenemos más en común con bandas que odiamos que con algún contable a quien le guste nuestra música. Pero si alguien como Disturbed o Avenged Sevenfold se van a cabrear por lo que nos pregunte alguien al respecto de ellos, no hay nada que podamos hacer al respecto.«