Kings Of Leon se vieron obligados a acortar el concierto que ofrecían el pasado 23 de julio en St. Louis, Missouri, después de que una bandada de palomas decidieran bombardear al grupo con ráfagas de excrementos.
«Jared (Followill, bajista) fue impactado varias veces durante las primeras dos canciones,» explica el manager del grupo, Andy Mendelsohn. «A la tercera canción, cuando le impactó en la barbilla y algo (de excremento) le cayó cerca de la boca, no pudieron seguir. No solo es desagradable, es una amenaza tóxica. De verdad que intentaron aguantar.»
Los teloneros, The Postelles y The Stills habían recibido avisos por parte de los pájaros y terminaron sus actuaciones quejándose de los pájaros. «Pese a ello, Kings Of Leon, decidieron continuar,» se lee en un comunicado de prensa. «La banda sintió que sería injusto para los fans cancelar el concierto a última hora.»
«No nos podíamos creer el aspecto que tenían The Postelles y The Stills tras su actuaciones. No quisimos cancelar el concierto así que nos subimos. Tratamos de tocar. Fue ridículo.«