Que John Lydon, alias Johnny Rotten, frontman de Sex Pistols, no se calla ni debajo del agua es algo sabido. Y que le da cera a todo lo que se menea también. Con más o menos razón, con mejores o peores fundamentos, pero Rotten siempre hace declaraciones que no dejan indiferente.
El último músico que ha recibido un varapalo de Rotten ha sido, ni más ni menos que el «Príncipe de las tinieblas», es decir, Ozzy Osbourne. «'Paranoid' fue uno de los mejores singles de todos los tiempos,» opina al Sunday Mercury sobre el tema de Black Sabbath. «Pero desde entonces, los rumores de que le arrancaba la cabeza a mordiscos a palomas no me ha impresionado. Ozzy actuando como un delincuente senil es igualmente nada impresionante. Su maliciosa insinuación promocional del abuso de las drogas y la estupidez catatónica me ofende.
Yo no soy de prohibir las drogas. Bastante al contrario pero entiendo como usarlas, y no me usan a mi. Ozzy es claramente una víctima y vendiendo ese estilo de vida de perdedor mierdoso a otra gente la victimiza también.
Eso es una vergüenza. Ozzy es un currante, como yo, y aún así permite que pase. Actuando como lo hace siempre, da por hecho de que las clases trabajadoras somos estúpidas. Pero no lo somos. ¡No lo somos! Somos la auténtica Gran Bretaña, nosotros.«