La fecha exacta en la que se ponía a la venta el “Nevermind” de Nirvana 20 años atrás, los 2 miembros vivos del grupo (Krist Novoselic y Dave Grohl) y el productor Butch Vig se reunieron en New York con el comediante Jon Sewart para una extensa charla de 2 horitas en “Sirius XM’s Town Hall” sobre como se gestó el legendario álbum.
Como recoge Rolling Stone, Stewart empezó recordando la primera vez que oyó el disco. “No podía creerlo. Tenía todo – peligro sonoro, melodía, urgencia, ironía. Era como si The Beatles se hubieran tragado a Black Flag,” les comentó a Novoselic, Grohl y Vig.
La grabación del disco fue fluida aunque hubo tiempo para un incidente: Kurt Cobain se frustró tanto durante la grabación de “Lithium” que se marcó esa descarriada jam que se convirtió en “Endless, Nameless”, el tema escondido, y acabó destrozando su guitarra. “Kurt podía ser realmente tierno y agradable, y de golpe, cambiaba a ser realmente intenso. Eso es mucho de lo que es la música del ‘Nevermind’ y Nirvana: la intensidad de Kurt capturada,” afirma Novoselic.
Las sesiones de grabación eran espartanas mientras que el tiempo libre, justo lo contrario: cada noche, la banda se iba a la playa, visitaba una licorería que tenía como signo un siniestro payaso y hacían el tonto en las instalaciones del estudio. “Hay esta falsa idea de que la banda iba a todos sitios con una nube negra encima y no era así,” comenta Grohl.
De las sesiones de mezcla, recuerda Vig que “estábamos entusiasmados por el hecho de que Ozzy Osbourne estaba en el estudio de al lado. Nos poníamos fuera del estudio y le escuchábamos cantar…”
Prosigue Grohl, “así que, una vez, nos emborrachamos en nuestro hotel y nos escribimos OZZY en los dedos. Estaba jugando al billar con Kurt cuando entró Ozzy, nos hizo una mirada asesina y se fue, ahí nos dimos cuenta de que teníamos OZZY escrito en los dedos. Fue la hostia de embarazoso.”
Los fans presentes en el estudio les preguntaron por como pasaron del underground al mainstream en un abrir y cerrar de ojos. “Teníamos esta actitud hacia el mundo mainstream de que no era para nosotros y nos sentíamos como intrusos. De golpe, éramos la banda número uno del mundo y metimos a gente (en el mainstream). Teníamos que reconciliar eso.”
En los últimos minutos de la entrevista, hubo momento para recordar a Kurt Cobain. “Desearía que Kurt estuviera aquí,” aseguraba Novoselic. “Hay un gran hueco. Para mi (su muerte) fue demasiada realidad, me puse como, ‘No, yo voy a vivir. Eso es lo que voy a hacer’.”
Añadía Grohl que “recuerdo despertarme el día después de la muerte de Kurt, diciéndome, ‘Guau, ¿puedo volver a despertarme? Vale. Tienes que reponerte de lo que tienes.”
La revista nos ofrece un pequeño fragmento de la entrevista (ojalá la gente de Sirius la cuelgue entera) cuyo final es una nueva muestra del genial humor de Dave Grohl.
Por cierto, no queremos ponernos pesados pero recordad que tenemos en marcha un concurso para celebrar la reedición del “Nevermind”.