“A decir verdad, llevo cantando música de Navidad toda mi vida,” confiesa Scott Weiland a Billboard sobre su disco de canciones navideñas que edita estos días. “Empecé cantando en primer curso, en el coro porque había dinero en las escuelas públicas para coros y música. Me eligieron para hacer dos solos – una era un villancico y otra una canción de Hanukkah. De hecho, aún recuerdo la mayoría de las letras. Así que tengo raíces para hacerlo.”
El cantante ha querido versionar clásicos como “The Christmas Song”, “White Christmas”, “Silent Night” y “Have Yourself A Merry Christmas” de forma tradicional. “Quería hacer un tradicional álbum de Navidad, como en los años 30 y 40. La mayoría de jóvenes quiere oír la versión de Justin Timberlake de ‘The Christmas Song’ o algo de R&B moderno o en plan country, como Faith Hill. Pero yo he conectado con los ‘crooners’ y rollos jazz. Realmente tocaron mi corazón – las bandas de Frank y Tommy Dorsey y todo el material de Nelson Riddle, Mel Torme, Judy Garland, Ella Fitzgerald, (Frank) Sinatra… Esa fue la edad de oro de la música realmente creativa.”
Weiland quiso recrear el dueto que Bing Crosby y David Bowie se marcaron en “Little Drumer Boy” / “Peace On Earth” con Leonard Cohen pero no pudo ser. “Él estaba de gira así que lograr que se viniera cuando estaba grabando fue muy difícil. Él quería hacerlo. Siempre ha tenido ese factor guay, molón así que habría sido guay hacerlo juntos y un honor increíble para mi.”
En declaraciones a SPIN, hace saber que no cree que vaya a causar sorpresa el disco entre sus fans. “Mi imagen ahora es una pizca de quien soy realmente. Igual que Keith Richards o Perry Farrell. Jagger nunca fue un auténtico drogata pero fueron vistos como chicos malos. Hubo un periodo de mi vida en los 90 donde era joven, tonto y lleno de tonterías.”
Weiland asegura que nadie ha tratado de quitarle la idea de publicar el álbum. “Te diré porqué: en los 90, antes de que STP firmáramos un contrato, Robert DeLeo (bajista de STP) y yo estábamos arruinados. Arruinadísimos. No teníamos dinero para comprar regalos a nuestra familia. Así que decidimos grabar una versión de ‘The Christmas Song’ pero no teníamos una orquesta. Teníamos un teclado con algunos buenos samples de instrumentos de cuerda y Robert le puso algo de papel higiénico detrás de las cuerdas de su bajo para silenciarlas para que sonara como un contrabajo. Tenía un Gibson 175 y tocaba la batería en él. Lo mezclé y se lo di a nuestros padres y abuelos y aún hoy dicen que es el mejor regalo de Navidad que han recibido nunca.”
Preguntado por qué canción le es más difícil de cantar, si un villancico o un tema como “Sex Type Thing”. “Es más difícil cantar una canción como ‘Sex Type Thing’. Particularmente esa canción porque solo tenía 22 años cuando compuse la melodía y la letra y es una canción anti-violación como ‘Polly’ de Nirvana. Fue el primer single que tuvo tremendo éxito. La historia de que era una canción anti-violación era bien conocida. Pero hubieron algunos conciertos en los que me disfrazaba de vieja de los 60 y había gente haciendo moshing. No se habían dado cuenta del mensaje de la canción. Han habido dos generaciones de fans de la música y los medios son completamente diferentes. Así que la gente no sabe de qué va ‘Sex Type Thing’. Así que me quema cuando veo a la gente haciendo mosh con esa canción. Era justo lo contrario de lo que teníamos en mente cuando la compusimos.”
¿Y para cuando un nuevo disco de Stone Temple Pilots? “Vendrá otro disco,” confiesa. “Normalmente empiezan antes que yo, sacando esbozos y juntando ideas en bruto en el ProTools sin letra ni melodías. Y entonces empiezo a escuchar y veo si es más bien un disco de rock and roll directo o más bien un álbum conceptual como fue ‘Shangri-La Dee Da’. Una vez decidimos eso, la cosa coge velocidad de crucero.”