Tras unos inicios en el 'metalcore' (siempre con miras al cielo debido a estar dentro de la etiqueta del rock cristiano), el sonido de los canadienses Blessed By A Broken Heart ha evolucionado hacia un rock de evidente influencia 'ochentera' (glam y hair metal), siguiendo un poco la estela de Steel Panther, Black Veil Brides o incluso los propios Avenged Sevenfold.
Hemos tenido la ocasión de charlar con el guitarrista Sam Robinson (que, curiosamente es de origen británico y sigue viviendo en el Reino Unido mientras sus compañeros viven entre EEUU y Canadá) sobre el nuevo disco «Feel The Power» o su inclusión dentro del rock cristiano.
pA: ¿Como te va, Sam?
Sam Robinson: Estoy muy bien, gracias. Un poco cansado, eso si, porque fui a ver a New Found Glory anoche. Fue un buen concierto, si.
pA: Déjame preguntarte por vuestro nuevo álbum, recién salido del horno. ¿Como está siendo la reacción general que estáis recibiendo?
SR: Bueno, las reacciones están siendo bastante buenas. La cosa es que Blessed no ha hecho nada nuevo en unos cuantos años así que es como si saliéramos de la nada. Aún así está siendo muy sorprendente la cantidad de gente que está volviendo a prestar atención a la banda. En estos tiempos mucha gente tiene una capacidad de concentración muy corta en cuanto a la música, con algo literalmente nuevo cada hora por lo que mantener una base de fans es algo que testimonia algo bastante guay. Ya te digo, personalmente estoy bastante feliz por como está yendo todo.
pA: ¿Dedicas tiempo a leer lo que la crítica y los fans dicen de vuestro material?
SR: Me gusta leerlo. Te emociona que la gente escuche tu trabajo y ver lo que piensa. Es divertido lo diferentes que pueden ser las opiniones de la gente: lees un análisis en el que les encanta el disco y te lees otro donde lo dejan a caer de un burro (risas) A veces me gusta leer las malas criticas porque me hacen reír (risas)
pA: ¿Te ayuda de alguna manera lo que lees? Ya sea para repetir cosas o para evitar otras…
SR: Cuando leo una mala crítica tiendo a pensar, ‘Bah, ¡que le den al tío ese! No sabe de lo que habla’ pero de alguna manera si te afecta, te hace un pequeño corte. Lo gracioso es que te olvidas de las buenas críticas y siempre te acuerdas de las malas. Y te cabreas. De alguna manera te cambia cuando las recuerdas para el próximo álbum y de algún modo te ayuda a tomar decisiones. A ver, nunca he cambiado lo que hago en un disco por una mala crítica pero trato de sacarle la parte constructiva de la crítica. Digamos que pienso más en lo que hago, lo repienso.
pA: ¿Qué hay de los fans? ¿Has escuchado o leído mucha crítica por el cambio de sonido que habéis mostrado en el disco?
SR: De lo que estoy viendo, está gustando bastante a los fans. Pero bueno, siempre hay gente que lo odia en Youtube o Facebook o así. Los fans están siendo bastante positivos al respecto. Lo cierto es que, como te dije, llevábamos un tiempo alejados de los focos pero ha habido gente que ha estado esperando nuestra vuelta. Ciertamente si es bastante diferente a ‘Pedal To The Metal’ (su anterior disco) por lo que tiene más mérito aún que hayan aguantado hasta que volviéramos y les haya gustado. Me muero de ganas de salir a tocar en directo.
pA: ¿Como ha sido la experiencia de trabajar con James Paul Wisner? Era también tu primera experiencia grabando con el grupo ya que entraste en 2010, ¿cierto?
SR: Si, yo entré en el grupo hace ahora dos años. Cuando estuvimos enseñando nuestro material para dar con un productor, te das cuenta de que te piden pasta con una facilidad asombrosa (risas) La cosa es que también estoy en otra banda llamada The Morning After y trabajamos con un presupuesto mucho más limitado y yo mismo me encargo de producir el material así que les dije, ‘No necesitamos gastar tanto dinero, yo puedo hacerlo’. Pero tras la experiencia me encantaría volver a trabajar con James, es un gran productor y sabe encontrarle lo mejor a tus temas, da con la mejor toma de todas las que haces. Sé que suena a cliché sobre cualquier productor pero conecté con él musicalmente bastante bien: estamos en la misma onda y, la verdad, eso es bastante extraño. Si has estado en una banda o has tocado música con gente sabrás que es bastante raro estar siempre de acuerdo con alguien y que dos personas estén de acuerdo en todo.
pA: Pero, cuando tu mismo puedes y sabes hacerlo, ¿es necesario tener a alguien de fuera dirigiéndote?
SR: Bueno, digamos que le quita mucho estrés a todo. Mira, nosotros mismos sabemos que hacemos todo mucho mejor cuando nos estamos divirtiendo. Es una regla de oro que sirve para cualquier cosa. Si tienes un buen productor, te quita presión pudiéndote centrar más en tocar tus canciones y pasártelo bien más que no tener un montón de trabajo delante con una fecha límite.
pA: ¿Como soléis componer? ¿Cada uno por su cuenta y luego ponéis en común lo que tenéis? ¿O os juntáis varios días y componéis?
SR: Lo que hicimos fue… Mi primera gira con los chicos fue una por el Reino Unido y luego hicimos la gira ‘Scream The Prayer’ en 2010 donde también tocaba con mi otra banda así que hacía dos conciertos por noche. Al terminar, tuve como unas dos semanas antes de mi vuelo de vuelta (al Reino Unido, donde vive), nos juntamos y sacamos un montón de ideas. Lo cierto es que cuando me uní a la banda, el álbum estaba relativamente hecho musicalmente, guitarras, bajo y batería por lo que mi rol fue escribir las letras. Yo e Ian (Slater, guitarrista) nos sentamos a oír las canciones y así es como lo hicimos. Hicimos algunos estribillos, aquí y allí como el de ‘Shut Up And Rock’, ‘Forever’. Luego me fui a casa y cogí todo lo que habíamos hecho y lo terminé en un par de meses. La verdad es que fue muy relajado porque tuve mucho tiempo, sin ninguna clase de presión para terminar las canciones y escribir las letras. Ya luego en el estudio, se las mostré a los chicos y la verdad es que todo se quedó como estaba. Así es como lo hicimos. La verdad es que he de decirte que casi nunca ensayamos porque el problema que tenemos para ensayar es que como vivimos a tanta distancia, cada vez que nos juntamos si nos pusiéramos a ensayar e improvisar, la cosa es que, a veces te puede salir algo genial pero la mayoría de veces te sale una ‘jam’ sin nada demasiado aprovechable. Me encantaría poder hacerlo así en el futuro pero, en estos tiempos, el tiempo es dinero.
pA: Internet debe ser, pues, una herramienta fundamental para el funcionamiento del grupo.
SR: La canción ‘Scream It Like You Mean It’ fue escrita íntegramente por mi e Ian vía e-mails. Mandando y respondiendo. Ian me mandó la música y yo le mandé la letra. Canté en mi estudio casero, Ian grabó en su estudio y así es como se hizo. Realmente, esa canción me gusta y puede que sea por haber sido compuesta de ese modo, teniendo un aire especial.
pA: ¿Donde encuentras la inspiración para las letras?
SR: Si te soy sincero me siento y escucho la canción un par de veces. Creo que lo más importante para empezar es la melodía vocal y lo normal es que me venga sola cuando alguien me da música y yo tengo como una visión de fuera. La cosa sale rápidamente. Voy tarareando y añadiendo palabras aquí y allá. Y luego me sale una frase pegadiza como, ‘En mi vida tengo cosas que no pueden durar siempre’ y me digo, ‘Si, esa frase mola’ y escribo la canción alrededor de eso. Al final es música, sabes. Nunca trabajo sentándome y diciendo, ‘Voy a escribir de esto’.
pA: Es más bien algo que te viene…
SR: Si, a mi no me funciona hacerlo de otra manera aunque seguro que si a otra gente. Es lo bonito de la música, lo que tiene cualquier arte: no hay reglas. Es lo que creas, lo que hay dentro de ti.
pA: Al final es inspiración: te viene, no tienes que forzarlo.
SR: Si te sale algo que suena a mierda puedes decir, ‘Si, esto suena a mierda, esperaré a que venga algo mejor’. Si suena bien, qué más da de donde venga, sale de ti.
pA: Este álbum suena bastante diferente al anterior, ¿os dio miedo perder fans por el camino?
SR: A ver, digamos que somos cuatro tipos componiendo música en un estudio para nosotros pero respetamos a nuestros fans ya que salieron a comprar ‘Pedal To The Metal” y nos han seguido todo este tiempo mientras la banda casi no ha hecho nada estos últimos años aparte de salir de gira. Respetamos a los fans por seguir con nosotros y les debemos cierto grado de consistencia entre álbumes. Por eso hay canciones como ‘Love Nightmare’, ‘Innocent Blood’, las canciones más heavys. Nos encantan esas canciones pero también están en el disco para que sirvan de transición y no alienar a todo el mundo con un nuevo sonido. Dicho eso, mayormente componemos música para nosotros y preferimos arriesgarnos haciendo música nueva más que no volver a hacer ‘Pedal To The Metal’ para conservar algunos fans. Preferimos perder fans y con suerte ganar más.
pA: Supongo que es algo humano querer hacer cosas diferentes.
SR: Siempre pienso que lo mejor es destruir tu trabajo previo. Necesitas olvidarlo, quemarlo y empezar de cero, crear algo diferente. Sabes, a nadie le gusta decir siempre lo mismo. Es exactamente lo mismo.
pA: Cierto, si. ¿Qué os parece toda la escena del metal cristiano? ¿Os sentís cómodos en ella? ¿Lo buscasteis o simplemente se os mete ahí?
SR: Bueno, mis creencias son muy diferentes a los del resto de integrantes de la banda. Los cristianos de la banda son Ian, Tony y Tyler. Es lógico porque Ian es de Florida, Tony de Nuevo México y Tyler del norte de Montreal, lo más cerca que puedas estar de Canadá. Yo soy de Londres, fui educado en el catolicismo, sabes, eso entra en conflicto con el cristianismo pero, tío, no pienso en esa clase de cosas. Para mi no es una banda de rock cristiano. Solo es música. No le veo relación con esa escena. El hecho es que de haber tocado en muchos sitios distintos puedo decir que en único lugar donde eso parece importar es en EEUU. Cuando tocamos en el Reino Unido y Europa todo es mucho más relajado y no hay mucha gente que nos pregunte por ese otro lado de la banda. En EEUU vemos a chavales que vienen y nos dicen, ‘¿Sois una banda cristiana? Porque yo solo escucho música cristiana’. Para mi eso es triste. Yo no ando metido en eso, en ese lado de la banda. Yo tengo diferentes creencias a las suyas pero todos componemos música juntos.
pA: ¿A la hora de escribir letras te influye mucho? ¿Hay temas que no puedes tratar?
SR: Bueno, yo escribo sobre mi; me considero una persona decente aún no siendo igual que el resto de los chicos. No escribo letras anti-cristianas, ¿sabes? (risas)
pA: Claro, porque no crees en eso. Es decir, tienes que escribir de cosas en las que crees.
SR: Yo no creo en las lecciones de la Biblia ni en nada de estas religiones organizadas por el hombre. No me fío. Tampoco soy ateo, ¿eh? Simplemente me considero un tío decente así que las letras salen de un lugar decente (risas) De cualquier modo siempre es una pregunta complicada cuando estás en una banda etiquetada como cristiana. Conlleva mucha presión. Simplemente soy yo mismo.
pA: Déjame cambiar de tema aunque siguiendo con otra pregunta con miga. ¿Qué te parece todo el fenómeno de las descargas de internet ahora con las leyes SOPA y PIPA en EEUU?
SR: He oído muchas cosas malas… La verdad es que no he leído con detenimiento nada de la SOPA pero entiendo que no es más que censurar internet. Solo te hablaré de las descargas: tío, sé que está matando la música. Mira, Bless By A Broken Heart tiene 15.000 ‘me gusta’ en Facebook -aunque yo odio esa mierda, me parece una gilipollez. Sacamos un comunicado diciendo que el 24 de enero sale el disco y que lo puedes reservar. Y cientos de personas entraron y pulsaron en ‘me gusta’. Y luego miramos los números y cuanta gente ha reservado el disco y son 40 personas. ¡Me cabreó tanto ver eso! Nos pasamos años componiendo esto y miles de horas grabándolo y luego un cabrón se lo lleva gratis. No es que nosotros vayamos a hacer dinero si se compra el disco, no es que sea yo egoísta diciendo, ‘Uuuh, estoy cabreado, estoy perdiendo dinero’. No voy a sacar dinero de esto haga lo que haga. No hay manera de sacar dinero en la industria musical ahora mismo. Pero el hecho es que si nuestros números son malos, un sello no nos apoyará para hacer giras, nadie nos sacará en la prensa y la banda morirá. No es que esté cabreado por perder dinero porque no estoy sacando dinero, solo lo estoy porque la banda morirá. Es como un negocio aunque odio llamarlo negocio porque es rock ’n’ roll. Quiero seguir tocando rock ‘n’ roll pero no podré seguir si el sello piensa que no somos buenos, que nadie compra nuestra música. Pero hay gente a la que gustamos, solo que consiguen nuestra música gratis. Esos números no se cuentan.
pA: ¿Son los servicios en ‘streaming’ (Spotify) el futuro?
SR: Si lo creo, si. Para serte sincero, me encantaría apagar internet (risas) Era todo mucho más divertido cuando entrabas en una tienda de discos y mirabas todo lo que había. Me encanta entrar en las tiendas de discos y mirar todo los discos para encontrar esa banda que te gusta…
pA: O comprar un disco decidiéndolo por la portada…
SR: Exacto, hay algo mágico en eso. Ahora puedes conseguirlo todo. Cuando consigues lo que quieres tan fácilmente ya no te es tan importante. Es lo que pasa con las descargas ilegales.
pA: Bueno Sam, ha sido un placer hablar contigo. Esperamos verte algún día por España o que visites Sudamérica. Muchas gracias por tu tiempo.
SR: Tan pronto como podamos iremos a España porque yo pregunto lo mismo respecto a las giras. Hacemos todo lo posible para acelerar el proceso. Sin duda estaré en España con Blessed By A Broken Heart y The Morning After.