Primero se dijo que había sido una rotura de brazo, luego un accidente de coche con lesiones menores y al final resulta que la lesión que se produjo ayer Mikael Akerfeldt, frontman de Opeth, fue por un golpe en el bus de gira de Mastodon mientras intentaba sacar unos nuevos calzoncillos rojos de su maleta. Lo ha explicado en Facebook.
“¡Hola chicos! Escribo desde debajo tierra. En serio, no tuve un accidente de coche ni me he roto el brazo. Todo lo que pasó es que me di en la cabeza en el bus de gira mientras sacaba un nuevo par de calzoncillos (rojos) de mi maleta. Creedme, desearía que la historia fuese más rock and roll. En fin, como fuere, me abrí la cabeza hasta el cráneo y tuve que ir a urgencias. Me dieron un puñado de pinchazos en la herida, la limpiaron y me cerraron la cabeza con ocho puntos. La cabeza duele y si me río parece que la herida vaya a abrirse de nuevo pero mañana estaré en el escenario de nuevo. Me siento muy decepcionado por no haber podido tocar en el Myth de Minneapolis pero los médicos me dieron que no podía. Volveremos a reubicar el concierto en nuestro próxima visita a EEUU. Así que todos esos rumores sobre un accidente de coche. Si que me di en la cabeza en un coche… Bueno, un bus. Siento decepcionar a los fans de Minneapolis pero espero que lo entendáis. Os veo la próxima vez. Los mejores deseos, Mikael.”