La gente de Exclaim! le ha pedido a Billy Corgan, frontman de The Smashing Pumpkins, que recopile los momentos más y menos memorables de su carrera.
“Creo que tengo una perspectiva ligeramente diferente de lo que la gente imaginaría. Creo que los puntos álgidos han sucedido cuando he tenido una banda que funciona y que puede rápidamente convertir canciones nuevas en música que podemos tocar. Diría que los peores momentos han sido cuando la música alternativa ha sido inundada por los cambios en la industria musical combinado ello con el cambio en lo que yo llamaría un nicho cultural precoz. La música alternativa ha sido siempre un nicho cultural y lo continuará siendo en su definición más auténtica pero ahora lo hemos roto en diez mil subgéneros con todo el mundo compitiendo por quien es más guay o quien es más tonto y eso ha socavado mucha de la fuerza, la fuerza colectiva, de una banda alternativa o artista para reunir fuerzas a su alrededor – que quizá estén más apoyando su ideología que su música – que pueden impulsarla y sus ideas y su expansividad (sic) de lo que están llevando a la cultura ‘mainstream’.
Lo que veo es que hay esta cosa tan fraccionada, que ahora estas bandas no tienen suficiente impulso detrás de ellas para llegar al ‘mainstream’. Creo que eso ha socavado la auténtica fuerza de la música alternativa, lo cual es joder las cosas. Se trata de liar las cosas para la gente a la que le gustan las cosas liadas, lo que da lugar a este rock and roll inocuo. Estaba el otro día leyendo un artículo de Chuck Klosterman que fue a ver a Creed y Nickelback la misma noche en Nueva York y decía, ‘¿Por qué odia la gente esas bandas y aún así hay público levantando el puño y cantando cada palabra?’ Es la dicotomía de la música ‘mainstream’ y la música alternativa y aún ahora, nunca terminan por juntarse. Hemos tenido unos pocos de esos momentos, con los Byrds cantando ‘Eight Miles High’ y lograr un éxito con esa, Sly and the Family Stone haciendo una música soul sublime. Eso es algo que pasó. Aún hay elementos peligrosos en el pop normal. Hay algunos productores radicales haciendo cosas como Nicki Minaj pero no parece que esté yendo más allá del mundo alternativo como había pasado durante 50 ó 60 años y eso para mi es bastante sospechoso porque parece que ahora todo el mundo va a existir en su propia burbuja y una burbuja autojustificativa – ¿no es nuestra burbuja mejor que la vuestra? Y es algo contra lo que siempre he estado independientemente de la época en la que vivía. Me choca como siendo alguien que se hizo adulto en los 90, con las barreras que logramos derribar colectivamente se haya convertido en esa cosa extraña. Parte de lo que nos enorgullecíamos era por presentar a los fans cosas como Electric Light Orchestra y Mudhoney. Se supone que tienes que hacer eso. No se supone que debas alabar tu subcultura. Eso, para mi, es extrañísimo pero es lo que estamos viviendo.”
En preguntas más livianas, Corgan cuenta que el primer disco que compró con su propio dinero fue “ “Meet The Beatles”. Cinco años. Vinilo” Y también recuerda su trabajo más memorable: “Repartidor de pizzas. Repartí pizzas (risas)”