Que Jack White, el que fuese líder de The White Stripes, es un gran amante de la música es algo de sobra conocido. Pero es que además, sus acciones dan fe de ello: la última -informa Billboard– es la donación de 200.000 dólares a la Fundación Nacional de la Conservación Discográfica, «una empresa público-privada creada para preservar y hacer accesibles los sonidos grabados de los EEUU.«