Dave Grohl ya explicó la semana pasada que el nuevo disco de Foo Fighters está compuesto y ahora reconoce a Spin que es cuestión de afinarlo para grabarlo.
Nos hemos puesto a ello las últimas semanas. Durante el pasado año que no hicimos nada de Foo Fighters, he estado llenando mi grabadora de cassettes casera con ideas para canciones. Entonces, le di a rebobinar, volví a escucharlo y pensé, «Oh dios mío, ¡tengo un disco! Guau, eso fue fácil». Ahora es cuestión de meterse en una habitación y sacarlo todo.
Como ya dejó caer en otras declaraciones meses atrás, el resultado espera que sea sorprendente.
Tengo una idea que nadie ha hecho antes nunca y vamos a intentarlo. No queremos avanzar demasiado de nuestro secretito pero está pasando y estamos bastante alucinados. Es un proceso mucho más involucrado que simplemente hacer un disco en la esquina de casa porque eso ya lo hemos hecho. Y todo el mundo hace eso. Así que, en este momento, quizá nos retemos a hacer algo más que simplemente sentarnos y hacer un disco para poder salir ahí y vender un puñado de camisetas.
Solo diré que tenemos bastante claro lo que tenemos y es emocionante. Tendremos un disco de Foo Fighters ¡y será la hostia!
Pero no es lo único que mantiene ocupado a Grohl: hace poco terminó la mezcla de los temas «perdidos» de Bl’ast (que Southern Lord publicará el 3 de septiembre) y también echó una mano a Kristeen Young tocando la batería en su nuevo disco.
Toqué la batería en su nuevo disco. Lo grabamos aquí (en los estudios 606 de Grohl). Soy yo, ella y Tony Visconti (productor). Él toca el bajo, yo toco la batería y ella los putos teclados y suena genial. Me encanta simplemente tocar.