La Rolling Stone ha entrevistado a Ed Kowalczyk, ex-frontman de Live, que anda de gira en solitario por EEUU presentando en formato totalmente acústico el que supone su segundo disco en solitario, «The Flood and the Mercy». No podían faltar las preguntas sobre la separación de Live que fue de todo menos amistosa después de que en 2010 sus compañeros de banda le demandaran por la firma de un contrato de publicación años antes y dos años después otra demanda por violación de derechos de autor. El vocalista no se quedó de brazos cruzados y presentó también otra demanda contra sus ex-compañeros.
Y mientras los que fueron sus amigos usaron la red para dar su versión de los hechos, él se mantuvo en silencio.
Evité hablar de ello no porqué no quisiera hablar de ello sino porque me parecía una distracción. Esto (su carrera en solitario) se supone que iba a ser un nuevo momento de luz en mi carrera y quería que la gente se centrara en ello.
Tras veintipico años, era momento de descansar y todos estábamos de acuerdo en eso. Acordamos dos años de paréntesis en 2009: pararíamos Live, toda la máquina y todo el mundo iría a hacer sus cosas. Hicimos el último concierto aquel verano en Long Island y luego vino esa pesadilla legal que empezó casi inmediatamente. Para mi, era una progresión natural (hacer cosas en solitario) pero hubo este inesperado e increíble desencuentro que esos tíos generaron contra mi que fue realmente chocante.
Me demandaron por este contrato de publicación de hacía años con el que todos estuvimos de acuerdo (en su día). De golpe y porrazo había esta fisura legal o ese problema. Yo siempre fui el compositor, siempre escribí las letras, melodías y la mayoría de la música en Live, y quería tener mi propia compañía editora y no una colectiva. Quería seguir adelante y empezar otro aspecto de mi carrera discográfica con los discos en solitario y estuvieron totalmente de acuerdo en 2006. Así que desenterraron esto y dijeron que les habían engañado, lo cual es totalmente falso. Según me dijeron era algo prescrito. Y fue algo totalmente malicioso. Me lo lanzaron para tumbarme durante el lanzamiento de «Alive», lo cual incrementó el shock y el asombro. Nunca antes me habían demandado en mi vida.
Kowalczyk seguía siendo miembro de Live a esas alturas.
Creo que (su acto) fue rabia porque me iba a hacer algo sin ellos. Es difícil decir qué motivos tenían o cuales son (esos motivos). Quedé totalmente estupefacto por sus actividades y acciones estos últimos cuatro años. Yo trataba de seguir adelante y encontrar esa energía, de nuevo esa pasión. A la misma vez que pasaba todo esto, estaba teniendo algunos de los mejores conciertos de mi carrera. Una de las primeras cosas que hice fue cantar con la Orquesta Metropole en Holanda. Estaba reconectando con los fans en esta manera maravillosa, nueva, íntima y poderosa. Estaba componiendo música genial. Así que para mi era simplemente raro. Estaba pasando por ese renacimiento de alegría en lo que hacía pero al mismo tiempo había ese contraste de asedio legal en el portal de casa. Tenían ese malicioso programa de ir soltando bombas legales cuando salió mi disco (en solitario), en mi cumpleaños, en nochebuena. Cada día tenía que compartimentar el hecho de que esos tíos que se hacían llamar mis amigos la mayor parte de mi vida, no lo eran.
La segunda demanda era por infracción de marca registrada: sus ex-compañeros no querían que Kowalczk se presentara como «Ed Kowalczyk de Live». Ahora el vocalista se anuncia como «Ed Kowalczyk anteriormente de Live».
Ha sido un problema como artista en solitario tras ser conocido con Live tanto tiempo y tener que informar al público y, al mismo tiempo, aguantar esos acuerdos que hice. Me parece una tontería e innecesario.
El vocalista fue consciente de que ya no iba a volver a Live después de la primera demanda.
(Con esa primera demanda es) cuando las cosas llegaron a un nivel estúpido. Es difícil, si no imposible, volver de un abuso de confianza que supone una demanda.
Su gira en solitario es un auténtico bálsamo.
El concierto en Nueva York la pasada semana sentó como un gran abrazo. Los fans están orgullosos de mi, de mis logros. Creo que también están orgullosos de como llevé lo que terminó siendo una ruptura. No menosprecié a nadie online. Lo mantuve tranquilo. De hecho, no había hablado con nadie al respecto hasta ahora. Y creo que aprecian eso. Porque esos tíos fueron realmente horribles en la red, vitriólicos y realmente desagradables – comentarios verdaderamente insultantes y oscuros sobre mi disco y riéndose de ello. Me dio igual pero quise evitar a los fans esa clase de mierda y traté de hacerlo – supongo que lo llaman tirar por la calle de en medio. Creo que los fans aprecian que podían entrar en mi web y iban a enterarse de nuevos lanzamientos y que no iban a ser un ojo por ojo. Está el aspecto de ser demandado por primera vez, y luego está el aspecto de ser yo, ser el letrista y melodista (sic) y compositor en Live, siendo el comunicador del espíritu desde mi corazón a tanta gente durante tantos años. Que alguien use esa credibilidad que ha sido desarrollada durante tanto tiempo, con tantas giras, que airearan toda la ropa sucia – y que fuese falsa – fue lo más duro. Porque ellos trataban de romper… No lo lograron porque, claramente, está más fuerte que nunca, mi relación con mis fans. Pero por lo que me siento más insultado y dolido por el hecho de que los fans no se lo merecen. Aquí había una relación que yo construi que ellos trataron de dañar e interrumpir. Y eso de verdad que duele. Eso fue lo más duro.
Ellos no son claros acerca de quien está en la banda. Oscurecen que no es la banda auténtica. No dicen que es la formación original. Simplemente van y sorprenden a la gente y eso es muy pobre.