Sigue el juicio contra Courtney Love por unos tweets difamatorios contra su ex-abogada. En la jornada de ayer la ex-esposa de Kurt Cobain echó mano de sus dotes dramáticas durante el testimonio de un empresario canadiense que explicaba como adquirió una guitarra que supuestamente perteneció al líder de Nirvana de un ex-técnico de guitarras de Cobain. Sin embargo, después de adquirirla descubrió que era falsa. Fue en ese momento cuando según Spin, Love se tapó la cara, resopló y empezó a llorar ostensiblemente por como ha sido tratada la memoria de su difunto marido estos últimos años.
Recordaréis que en 2010, la cuenta de Twitter de Love acusaba a su ex-abogada, Rhonda Holmes, de dejarse comprar cuando ésta no la ayudó en un juicio contra los managers de la herencia de Cobain.
Precisamente el empresario canadiense explicó que se puso en contacto con Holmes pero esta no le devolvió las llamadas, corroborando las alegaciones de Love de que Holmes había «desaparecido«.
Según explica Bloomberg Businessweek, se trata del primer caso de calumnia vía Twitter en llegar a juicio. Un caso anterior también con Love como protagonista -una disputa con una diseñadora de moda vía la red social- acabó en un acuerdo pre-judicial por el que la frontwoman de Hole acabó pagando 430.000 dólares.
En su testimonio del miércoles, Love aseguró que su comentario no era más que una opinión y que creía estar hablando en privado con dos personas.
Sin embargo, el abogado de Holmes especificaba posteriormente en una entrevista con una TV que, independientemente de quien leyera el comentario, no cabe duda que era una frase dañina.
Sobornar significa que alguien se acercó a (Holmes) y le pagó un soborno.