De acuerdo a un artículo que publica TMZ, una fuente cercana a la investigación del suicidio de Chris Cornell afirma que el brazo del vocalista mostraba claras evidencias de marcas de vías, que suelen indicar el uso de drogas intravenosas. Por el momento, eso sí, no hay confirmación oficial al respecto.
La noticia ahonda en otra aparecida hace unos días en la misma web que aseguraba que el vocalista iba «colocado» en su último concierto con Soundgarden, citando la opinión de Ted Keedick, encargado del sonido en la gira del grupo y que trabajó en el último concierto del vocalista.
Chris estaba fuera de sí desde la primera nota del concierto. Nunca le había oído o visto así antes, al menos sin haber cancelado un concierto. Nunca antes había escuchado su voz así. Estaba teniendo graves problemas de control.
Keedick explica que lo vio tan mal que llegó a llamar al backstage para preguntar qué le pasaba a Cornell.
Como bien sabéis, el músico tuvo problemas con las drogas en el pasado que le llevaron a rehabilitación pero llevaba, según se creía, bastantes años limpio.
Arriba podéis ver el concierto completo y sacar vuestras conclusiones.