La viuda de Chris Cornell, Vicky Cornell, estuvo ayer en el programa de la ABC «Good Morning America» recordando a su marido. Así, Vicky explicó que Cornell tuvo una recaída en las drogas pocos meses antes de su muerte.
No creo que pudiese tomar ninguna decisión por su nivel de discapacidad.
De acuerdo a la mujer, su esposo llevaba sobrio desde 2003 pero recayó en su adicción después de que se le prescribiera benzodiazepina para superar una lesión.
Aproximadamente un año antes de su muerte, se le prescribió benzodiazepina para ayudarle a dormir. Se rompió el hombro… El dolor en el hombro le despertaba de noche y le mantenía despierto.
Cornell mostraba signos de recaída después de que empezara a tomar «veintipico pastillas» durante una semana y 33 en otro periodo de nueve días.
Tenía un hablar lento, se olvidaba cosas. El cerebro de alguien que tiene un trastorno de abuso de sustancias es diferente del de alguien que no lo tiene. Recayó.
En marzo de 2017, Chris le mandó un email a un amigo diciendo, «Querría hablar, he tenido una recaída«. Desgraciadamente, el vocalista no superó sus problemas y ofeció su último concierto el 17 de mayo del pasado año.
Estaba fuera de tono, olvidaba las letras, se bajó del escenario. Chris Cornell no hace esa clase de cosas. No es esa clase de estrella del rock.
Piensas que la adicción es una elección y no lo es. Está en todas nuestras casas. Les pasa a los ricos, a los pobres, no tiene fronteras raciales, no discrimina. Creo que si no hubiera tanto estigma más gente hablaría de ello. Mi esposo era lo más alejado a una estrella del rock yonki. No lo era. Era el mejor marido, el mejor padre. Perdí mi alma gemela y el amor de mi vida.