En una reciente entrevista con la Rolling Stone, el vocalista de Black Sabbath, Ozzy Osbourne, explicaba que le gustaría que en el concierto de despedida del grupo, el próximo mes de febrero en Birmingham, estuviera el batería Bill Ward.
Osbourne responde sobre si está triste de que llegue el final del grupo:
La verdad es que no. Ahora mismo lo estoy pasando de fábula. Supongo que pensaré de otro modo cuando hagamos el último concierto. Estoy triste porque Bill no volviera.
Pese a la añoranza, tampoco parece tener intención de convencerle para que vuelva:
No lo sé. Cada vez que contacto con Bill me caen gritos por algo. Si se puede solucionar algo, genial. Tommy (Clufetos) está haciendo un gran trabajo.
El propio Ward ha querido explicarse vía Facebook:
Ozzy nunca se ha puesto en contacto conmigo desde el 26/27 de enero de 2012 cuando llamó para ver si iría al Reino Unido para unirse a los ensayos del CD «13». Desde esa última llamada, nunca me ha vuelto a contactar ni yo a él.
Ozzy estoy triste porque Bill no volviera. Ozzy tiene que mirar a los que me pararon de volver. El contrato era imposible de firmar; la retórica del grupo de 2012, 2013 y así, criticando, condenando y con multitud de evaluaciones deshonestas hacia mi como persona, incluyendo los calificados como problemas de salud. De haber firmado el contrato, supongo que habrían dicho que tenía mala salud o todas esas referencias moralistas.
Como recordatorio, en septiembre de 2015, preguntamos a un representante de Sabbath si habría alguna posibilidad de tocar con la banda de nuevo. Su representante contestó «no». Es difícil volver cuando te dicen «no».
Amo a todos nuestros fans de Sabbath en todo el mundo, y lanzar ideas por ahí de que quizá toque en los conciertos de Birmingham es descorazonador y malicioso. Creo que los fans de Sabbath que han amado la banda original han pasado por suficientes decepciones y tristeza. Para mi, tocar solo en Brimingham sería discriminatorio y elitista hacia nuestros otros fans del resto del mundo. Yo nunca podría ser discriminatorio o elitista con nuestros fans.
Ha sido suficientemente descorazonador no grabar ni salir de gira y será descorazonador no tocar para los fans de Birmingham. Debéis saber que las circunstancias no son obra mía. Esto no es lo que habría querido o lo que haya escogido. De haber tenido cualquiera de vosotros que firmar un contrato que os socavara y subestimara, creo que la mayoría de vosotros con algo de dignidad y respeto por uno mismo lo habrías rechazado también.
Mi ausencia en los actuales conciertos y los próximos conciertos de Birmingham refleja una desgracia innegable e inédita que mis acusadores no soportarán. Se llama egoísmo y egocentrismo; falsedad y deslealtad. Son los culpables de la defunción de la formación original de Sabbath.
-Bill.