La revista Metal Hammer ha entrevistado al hermano del fallecido Dimebag Darrell y a la que fuese su pareja durante más de 20 años, Rita Haney. Ambos siguen sin perdonar a Phil Anselmo ni tampoco a Rex Brown por la ruptura de Pantera y posteriores cruces de insultos.
«No creo que a Dimebag no se le valore como merece; él sabía que era el alma de las fiestas y un personaje que se llevaba bien con todo el mundo. Puede que la gente le viera solo como un 'fiestero' pero a él ya le estaba bien y nosotros tampoco teníamos problema con eso.»
Cuando empezaron los primeros problemas con Phil Anselmo en Pantera, los dos hermanos se apoyaron. «Oh, si, hablábamos todo el rato entre nosotros. Llegamos a hacer varios intentos de llegar a Phil. Al final, notamos que la cosa se había alejado demasiado y necesitábamos hacer algo. Recuerdo que Dime había hecho algunas demos y Jerry Cantrell (Alice In Chains) estaba por ahí. Estábamos ahí con él saliendo por ahí, bastante deprimidos. Dime se llevó a Jerry en el coche y le puso las demos -que luego se convirtieron en Damageplan– y Jerry dijo, 'Necesitas tirar 'palante' y hacer lo tuyo'. Dime volvió a casa y dijo, 'A la mierda, no vamos a estar esperando más tiempo. Empecemos nuestra propia banda y hagamos lo nuestro'. Y así salió Damageplan. »
El punto de no retorno de la amistad entre Anselmo y Paul y Dimebag llegó en 2004, tras una entrevista del cantante con Metal Hammer. En la misma, Anselmo llegaba a declarar que Dimebag merecía «que le peguen bien fuerte.»
Tras aquello, la relación quedó definitivamente rota y Paul no ha querido volver a saber nada del que fuese frontman de su banda. «No, no quiero hablar con él. No me creo nada de lo que dice. Es el maestro de las mentiras. Dice esa mierda porque quiere que los fans crean lo que tiene que decir y sigan lo que hace. Y son como corderos y le seguirán. No quiero extenderme más aparte de decir: escuchad la entrevista de Metal Hammer y sabréis exactamente lo que sentía por mi hermano. Ahora puede decir lo que quiera. »
La pareja de Dimebag tampoco tiene palabras amables para Anselmo aunque también extiende su cabreo al otro miembro de la banda, el bajista Rex Brown.
«Quiero a esos tíos con todo mi corazón y mi alma pero ahora mismo no puedo quererles. Cuando Darrell les perdone, entonces podré. Me duele tener que decir eso y saber eso.
Tengo una carta de dos páginas que (Dimebag) escribió a Philip. Y dice, 'He terminado con ñel. Nunca volveré a subirme a un escenario con él y nunca le daré el reconocimiento que cree merecer porque sé que nunca le hice nada malo'. Y dice, 'Nunca más volverá a pisotearme mi tranquila mente'. Cuando encontré eso en el baúl (de Dimebag tras su muerte), lloré.»
¿Si la trágica muerte no hubiera llegado, cree que Haney que podrían haber vuelto a reconducir la relación? «Sé que Darrell pensaba en ello. Estaba teniendo problemas con Patrick (Lachman, frontman de Damageplan), que resultó ser la persona que pensábamos que era. Empezó a soltar ultimatums sobre no cantar canciones de Pantera y Darrell le soltó, 'Déjame que te diga una cosa: esto es quien soy. Me llame o no así, eso es mi corazón y mi alma y si, tu vas a cantar eso. Lo sabías cuando entraste en la banda.»
¿Y el mal rollo con Rex Brown? «Darrell habló con Rex en el cumpleaños (de Dimebag, 38 años) y le dijo a Rex que se aclarara, 'Tío, no voy a salir a comer un filete contigo hoy. Quizá en el futuro. La razón por la que hablo contigo es porque tenemos una historia. Dormiste en mi sofá, mi madre fue tu madre, tu fuiste mi hermano. Pero tu tienes la misma culpa en todo esto y deja de echarle toda la culpa a Phil. Tienes que responder por ti mismo'. Y Rex seguía diciendo, 'Bueno, Phil se iba a ir de todas formas', y Darrell le dijo, 'Me da igual – responde por ti, por que, ¿sabes qué, cabronazo? Has ido de gorra en todo este viaje con Pantera. Así que, no me digas que es todo culpa de Phil – ¡tu has estado en esto para la pensión completa!' »
Preguntado Paul sobre sus últimos recuerdos de la trágica muerte del asesinato de Darrell, cuenta que «lo último que realmente me importa es lo que nos dijimos antes de salir al escenario. Estábamos calentando en el lateral del escenario como siempre y ambos estábamos realmente emocionados – solo nos quedaban dos conciertos y luego nos íbamos para casa por Navidad y a empezar a trabajar en el segundo disco (de Damageplan). Nuestro palabra para dejarlo todo y pasarlo bien era 'Van Halen'. Y esas son las dos últimas palabras que nos dijimos. Yo dije 'Van Halen' y él dijo 'Van Halen', y nos chocamos las manos y subimos a hacer lo nuestro…Y un minuto y medio después no volvería a verle nunca más.«