Con la excusa del lanzamiento de «Bad Witch», Trent Reznor ha sido entrevistado por The Guardian. Reflexionando sobre el estado actual de la industria, sobre su carrera y su madurez artística, nos ha dejado algunas perlas que compartimos a continuación:

Sobre sus adicciones:

El botón de auto-destrucción fue presionado cuando comencé a escribir. Había una sensación de que no podía encajar en ningún lado, no podía conectar con la gente; me sentía solo, me sentía enojado con eso. Y parte de mi sigue así. Sentía que iba en camino a algo que no iba a tener un final feliz. Eso terminó siendo la adicción: Sus garras estaban en mí pero no se había revelado por completo.

Yo no era el niño que a los 12 bebía una cerveza y se volvía un hombre lobo. Apareció de a poco. No estaba preparado para el efecto transformador de la fama y el reconocimiento. Ahora todos están aquí para verme, y todavía siento que no pertenezco, que no me merezco estar ahí, que no sé cómo actuar. No sé cuánto de eso es aprendido, cuánto es por experiencia, cuánto está en mi ADN, cuánto está en cómo fui criado. Pero me encontré incómodo en un escenario en el que todos quieren ser tu amigo. Tomar un trago o dos era una herramienta. Ayudaba, por un tiempo, hasta que empezó a definir quién era. En cada escenario tenía que beber, porque ese era yo ahora.

Alguien que fue de gran ayuda para mejorar la situación fue David Bowie, a quién Reznor describe cómo su héroe. Bowie estuvo de gira con Nine Inch Nails en el 95 y Reznor sintió que fue una gran ayuda. No al estilo de una lección, pero vi a alguien que había superado la adicción, y era feliz y optimista y se manteía audaz. Pensé: Si él puede hacerlo, tal vez haya una luz al final del tunel.

También da crédito a la ayuda de su esposa Mariqueen Maandig (con la que formó la banda How to Destroy Angels) y a la de Atticus Ross, quién se ha convertido en su más habitual colaborador en proyectos independientes y en Nine Inch Nails. De hecho, Reznor confirma que la dupla ha estado trabajando en dos grandes cosas y dos cosas pequeñas para la banda, de las cuáles no puede contar nada.

Tras su experiencia corporativa con Beats Music, que fue adquirida por Apple en 2014, Reznor se concentró en la música junto a Ross, escribiendo una serie de obras que empezaron desde una posición de creo que sé quién soy ahora, el caos se siente detrás, hay una vida familiar y estabilidad. Fui yo desafiándome a decir ‘¿Que pasaría si todo esto fuese mentira y lo que realmente soy es un adicto en remisión que no puede esperar a prender la mecha de todo?’.

Además de esta visión personal, Ross y Reznor consideran que su obra es un reflejo de la América de Trump:

Se siente como si todo se estuviese desquiciando, social y culturalmente. El alza del «trumpismo», el tribalismo; la celebración de la estupidez. Estoy avergonzado, en un escenario mundial, de cómo debemos vernos como cultura. Es ver la vida a través de los ojos de un padre de cuatro niños pequeños… ¿en qué están creciendo? ¿Y quién soy yo en este mundo dónde cada día se siente cómo si el mobiliario se hubiese movido levemente mientras dormía?

El EP «Not the Actual Events» fue una fantasía de autodestrucción que se acercaba a los Nine Inch Nails de los 90s. El siguiente, «Add Violence», era sobre el mismo tema, pero diciendo ‘quizás no soy yo, quizás es el mundo, quizás todo es una simulación’. «Bad Witch» viene de una compresión de que, finalmente, todo es nuestra culpa: No somos esos seres iluminados, que estamos para cuidarnos los unos a los otros y pensar en nuestro rol benevolente en el universo como protectores y creadores. Somos una puta mutación y un accidente.

Y no fue sólo la presidencia de Trump la que trajo este cambio, fue nuestro comportamiento online: Nos volvimos más estúpidos, más tribalizados. Encontramos nichos de otras personas que se enfocan en extremos. A pesar del milagro de todos compartiendo ideas, veo muchísimo más racismo. No se siente cómo que hemos avanzado. Creo que estamos viendo la caída del imperio de América en tiempo real, delante de tus ojos. Internet ha erosionado la base de la decencia en nuestra civilización.

Siguiendo con la línea de internet, Reznor opina sobre las redes sociales:

No creo que el buen arte provenga de estar demasiado preocupado o hiper consciente de las expectativas de tu público. Comercializa tu marca: Eso es parte de lo que es ser un artista, tristemente.

«Black Witch» está disponible en la tienda oficial de Nine Inch Nails y también puede escucharse en las principales plataformas de streaming.