Tom Morello, guitarrista de Rage Against The Machine, estuvo charlando con Lars Ulrich en su programa de Beats 1 donde recordó el fin de la banda, considerando que él fue el máximo responsable.
Me pongo como el primer y principal (causante de la separación). Fue una ausencia de madurez emocional con la que tratar entre nosotros como personas. Teníamos una visión política y los conciertos nunca sufrieron pero no nos poníamos de acuerdo en cosas y eso desenterró sentimientos que dificultaron hacer discos. Creo que teníamos miradas diferentes de lo que se suponía que era Rage y sentimientos enfrentados sobre lo que era estar en una banda que no llegamos a tratar.
Mi versión de la banda era, ‘hagamos un disco cada seis meses. Seamos los Led Zeppelin políticos y derroquemos el gobierno y hagamos los mejores discos que nunca nadie haya hecho… Antes del miércoles, ¡vamos, vamos, vamos!’.
Con el paso de los años, el guitarrista ha comprendido que lo que lograron fue todo un éxito:
Mi versión del vaso medio lleno es que para una banda que tenía elementos extremadamente combustibles, ser capaz de hacer cuatro discos y haber podido hacer los conciertos que hicimos, me parece un milagro.
Morello explica también como el regreso en 2007 nunca tuvo como objetivo grabar nuevo material:
Nos juntamos en 2007 y lo pasamos genial. Nos divertimos en el escenario, fuera del escenario, jugando a ping-pong, saliendo por ahí, a mí me pareció que hubo mucha camaradería pero una de las cosas que ayudó fue quitar de en medio cualquier cosa que en el pasado había generado controversia -componer música, conceder entrevistas, tener un manager; no íbamos a hacer eso. Íbamos a hacer conciertos y pasarlo bien y poder mirarnos a los ojos y pasarlo bien, y no ser alguien que causó controversias en el pasado.