Los británicos Anathema vieron como su estreno en directo el pasado fin de semana en Tunez tuvo que ser cancelado oir orden de las autoridades del país que catalogó al grupo como «satanista«.
Los de Liverpool iban a tocar en la capital tunecina en una iglesia desconsagrada ante más de 1000 fans que habían agotado las entradas para el acontecimiento y pese a querer intentarlo la noche posterior, tampoco pudo hacerse.
Según escribió el técnico de guitarras Darryl Anthony en su blog, «nuestro promotor nos informó que alguien había informado al ministro de interior tunecino de que Anathema eran unos adoradores de Satán que comían gatos negros y se bebían su sangre. El ministerio pidió entonces ver las letras para poder aclarar el asunto. Es una pena tan grande para todos los fans tunecinos…No sabemos realmente a quien culpar: han habido muchos rumores y silencios al respecto de este asunto.»
Por su lado, el LiverpoolEcho.co.uk recoge unas declaraciones de Danny Cavannagh, frontman de los británicos. «Si te lees cualquiera de nuestras letras, puedes ver que nada más lejos de la realidad respecto a todo lo que se ha dicho. Ni siquiera usamos tacos en nuestras canciones. Muchas de las letras tratan de recuperarse, y la luz y son muy positivas. Solo somos tipos normales: la última banda a la que podrías acusar de satanista. Pienso que no fue más que una maniobra de un promotor rival que quería que el concierto fuese cancelado como fuese y usar las palabras 'heavy metal' le sirvió. Pero ha habido mucha desinformación. Podría ser que al final fuese que nuestro promotor no lograra todos los permisos. Esto ha sido una gran noticia en Tunez y mucha gente ha quedado decepcionada y esperamos poder volver en junio para compensar toda la buena fe de todo el mundo.«