TimesLeader.com ha hablado con el batería de Disturbed sobre la situación de la escena musical en EEUU, su nuevo álbum o la entrada del nuevo bajista en la formación.
Explica Mike Wengren que «tuvimos sugerencias de gente del sello que nos decía, '¿Por qué no simplificáis todo? En lugar de tocar con tanto doble bombo, ¿Por qué no lo simplificáis todo un poquito?' Y solo para darle un poco más de cachondeo a la cosa lo probamos un par de veces pero, sabes, no sabemos como hacer eso.»
El batería cuenta que la escena musical no es que merezca mucho respeto o que se le preste mucha atención. «Hay mucho R&B, mucho rap, pop, las listas están copadas con eso. Me gustaría ver más rock, y que se ganara algo de respeto. Para mi es frustrante, para todos nosotros. Es decir, sin querer desmerecer a ninguna de las bandas que hay por ah´pero cuando enciendo la radio la mayoría de veces no sé a quien escucho porque me suenan todas iguales.»
Preguntado sobre si George W. Bush ha servido como inspiración a muchos de los temas de «Ten Thousand Fists«, Wengren afirma: «Fue una gran inspiración para las letras del disco. No diríamos de ninguna forma que este sea un disco político pero sin duda es el más político de los 3. Tenemos unas cuantas canciones que hablan de la guerra. Está la canción 'Deify' y pese a que la gente tiende a pensar que es una canción anti-Bush, no lo es. Es un ejemplo perfecto de desafiar a alguien, cuando alguien piensa que un ser humano normal es como un dios.»
Sobre la llegada al grupo de John Moyer, asegura Wengren que «ha sido genial. Ha añadido nueva energía y emoción a la banda. Ha sido un músico genial y nos estamos compenetrando muy bien en el escenario todos juntos.»