El nuevo disco de Machine Head, “Unto The Locust”, es un nuevo paso en la misma dirección que tomaron con el disco que marcó un antes y después en su carrera, “Through The Ashes Of Empires” pero tratando de ir cada vez más allá y explorando nuevos sonidos.
Robb Flynn, hablando con Metal Insider, ha explicado como ha sido el proceso compositivo del álbum. “Me encantaría decir que tenía una gran idea, esa gran panorámica (de como iba a ser el disco) pero si te metías en el local de ensayo de Machine Head, era tan ‘Beavis And Butt-Head’. Es como, ‘¿Qué te parece este riff?’, ‘¡Oh, ese mola!’. ‘¿Qué te parece este riff?’ Simplemente probamos cosas y a veces tengo ideas locas. Pruebo y compongo y entonces, afortunadamente, los chicos me dejan que siga adelante.
Hay muchas más armonías y mucha musicalidad. La influencia neoclásica abrió muchas de las puertas que pudimos abrir. Sabes, por muy contrario que seas a tener notas malas, yo no lo soy – fíjate lo instruído que estoy. Las llamo notas malas o tristes o felices, o sabes, ‘ves al 3r traste, ves al 2º traste’. No sé nada de teoría, simplemente lo oigo en mi cabeza. Pero para mi, teniendo eso -al contrario de las notas malas, un poco más de las notas tristes- en el contexto clásico, abrió mis melodías y entonces podías construir cosas encima. Y mientras más seguíamos, más ambiciosos nos hacíamos, en plan, ‘Joder, apilémoslo y a ver qué pasa’. Mejor ir demasiado lejos y luego retraerse que no ir nunca demasiado lejos.”
Explica Flynn que “siempre hemos tenido canciones largas,” contestando a porqué desde “Through The Ashes Of Empires” la banda ha ido enlazando temas de más de 5 minutos, como mínimo. “Mira, en ‘Burn My Eyes’ tenías ‘A Thousand Lies’ que duraba 7 minutos, ‘A Nation On Fire’ duraba 7 minutos, ‘Death Church’ duraba seis minutos. Sabes, en ‘Supercharger’, ‘Trephination’ duraba siete minutos. En ese disco (‘The Blackening’), las primeras cuatro canciones que compusimos no indicaban que las canciones fuesen a ser largas. Las primeras cuatro canciones que compusimos eran las más cortas del disco – ‘Beautiful Morning’, ‘Slanderous’, ‘Aesthetics Of Hate’, ‘Now I Lay Thee Down’. Los primeros cuatro meses de la grabación era hacia donde íbamos. Entonces, en algún momento, salió ‘Clenching’. Nunca hemos compuesto para las radios. Nunca hemos contado el minutaje de nuestras canciones pensando, ‘¿Funcionará esto?’ Componemos hasta que sentimos que está hecho. Y cuando vimos la duración de ‘Clenching’ quedamos acojonados, ‘¡esta puta canción dura 10 putos minutos y es la hostia!’ No da la sensación de durar 10 minutos, ¿sabes?
Algunas bandas componen una canción de 4 minutos y da la sensación de ser una canción de 10 minutos, ¿sabes? Yo siempre he querido componer una canción pop en el sentido clásico de una canción pop: verso – estribillo – verso. Si, quiero ganchos. Quiero cosas que se repitan. No quiero componer una sopa de riffs. Nunca he querido hacer eso. Incluso mis bandas favoritas – sabes, Mercyful Fate, Metallica – tenían una canción ahí. Quizá en medio de todos esos giros y vueltas que daban pero terminaba volviendo a una canción. Y sigo sintiendo que eso es muy importante. A veces son más cortas, a veces más largas. Puedes planear todo lo que quieras pero al final, más que menos, la música solo irá por un camino. Tienes que dejar que la música te lleve a donde va.”
Del revival del ‘thrash’ que se ha venido viviendo estos últimos años, opina que “se va apagando. Pero estuvo bien. Me pareció que moló. Es decir, ver a chavales llevando vaqueros rotos y bermudas y camisetas – con 16 años y la gorra. Me decía, ‘Así era yo’. Vi esa conexión.” De las bandas surgidas, indica que “Municipal Waste me parecieron buenos. Pensé que Bonded By Blood estaban realmente bien. Las dos bandas que parecen haber trascendido un poco más allá son Lazarus AD y Evile. Sabes, han logrado salir de ahí y continuar. Me gustaría que siguiera en una dirección más original. Creo que América tiene afición por el pasado. En América siempre ha habido un rollo retro y aún pensando que tiene su encanto – uno de mis guitarristas favoritos de todos los tiempos es Jimi Hendrix. Y nunca pude ver a Jimi Hendrix pero hubo un tipo con el que me crucé 20 años después que era un tío Jimi Hendrix. Llevaba su cinta para el pelo y tocaba las canciones y hacía lo mismo pero no sé. Prefiero encontrar cosas nuevas y vivir en el presente. Soy un tipo que vive en el presente.”
Finalmente le preguntan por Spotify y hacia donde se dirige la industria musical. “Sé que mi batería tiene Spotify en su iPhone y le encanta. Yo no lo tengo. Probablemente no habré comprado un CD en tres años o así. Lo consigo todo de iTunes. Va directo a mi teléfono. Lo puedo enchufar directamente en mi coche. Así que hay ese factor de conveniencia. Y eso es lo emocionante. Son tiempos emocionantes. Está ocurriendo un gran cambio y lo estamos viviendo. ¿Y quien sabe a donde se dirigirá? Llevo haciendo música 25 años y no estoy muy cualificado para hacer otra cosa. He tenido extraños trabajos aquí y allá pero esto es lo que hago. Esto es lo que voy a hacer. Y allá donde vaya, ahí estoy yo. Voy a seguir sacando música y creo que la gente -mientras apoye a las bandas y a los artistas, siempre estará ahí, de la forma que sea.”