La revista Decibel le dedica un especial a Isis que se irá completando con varios artículos más con el que rinden homenaje a una de las bandas pioneras del 'post metal'.
El guitarrista Mike Gallagher recuerda las giras de la banda. «Con el paso de los años Isis ha tenido el placer de girar por gran parte del globo. Tuvimos el honor de compartir escenario con algunos de nuestros ídolos de toda la vida. Viajamos a partes del mundo que, de otro modo, nunca habríamos visitado y conocido a gente por el camino que serán nuestros amigos por el resto de nuestra vida.
Dicho eso, son las estúpidas mierdecillas las que se me quedan grabadas en la cabeza cuando recuerdo nuestras giras. Por ejemplo:
– En 1998 aún no teníamos del todo perfilados los detalles de la gira. Como resultado de ello, estuvimos dando vueltas por New Bedford, Massachusetts durante horas para encontrar el local donde teníamos que tocar esa noche. Esto era antes de los 'smartphones' y el GPS, así que eso significaba horas y horas de mirar en el listín telefónico de las cabinas y pararnos en tiendas a preguntarle a la gente donde dar con ese misterioso lugar. Nunca encontramos el local pero nos partimos el culo porque Aaron no paraba de poner 'Loking Out My Back Door' de la Creedence y después de no mucho tiempo, lo absurdo de la situación se hizo demasiado hilarante como para tomarnoslo en serio.
– En nuestro primer viaje a Australia, nuestro manager de gira, Dave tuvo la previsión de darnos unos días de asueto en la playa antes de tocar. No acabé de pillar del todo lo que Dave quiso decir cuando nos dijo claramente que ahí casi no había capa de ozono y que por ello, teníamos que tener mucho cuidado con la sobrexposición al sol, incluso con protector… Digamos que después de muchas horas de retozar en la playa, algunos de nosotros aprendimos de la peor manera lo que significa la falta de ozono. Algunos de nosotros, incluído yo, estábamos quemados como si estuviéramos en el infierno. Aún así lo pasé genial en la playa y en los conciertos pero algunos de nosotros andábamos como gambas zombies durante unos días.
Estoy increíblemente feliz de haber tenido la oportunidad de haber tocado y salido de gira con Isis durante más de doce años. La experiencia me ha enseñado lecciones inestimables sobre la vida y fue un camino largo y satisfactorio.»
Por su parte, el batería Aaron Harris explica que «crecí con Isis. Tenía 19 años cuando formamos (la banda) y 32 cuando terminamos. Esos son los años en los que la mayoría de la gente va a la universidad, se saca carreras, miran quienes son y se hacen adultos. Para mi fue un poco diferente. Cuando empezamos en 1997 como una idea entre amigos se convirtió en una banda internacionalmente conocida con un seguimiento que dio más sensación de ser una comunidad que una 'base de fans'.
Nunca tuvimos ninguna visión de viajar por el mundo o vivir de tocar nuestra música. Recuerdo cuando vendimos 60 y pico copias de nuestra demo en cassette en un festival y no podíamos creerlo. Tengo tantos recuerdos: nuestra primera gira en EEUU con Cave In; la primera vez que tocamos en Londres en 2004 que también fue la primera vez que atrajimos a más de cien personas; ser invitados por Tool para tocar en su gira de '10000 Days' y todas las amistades que formamos alrededor de nuestra familia de Isis.
Es difícil aislar mi experiencia favorita pero puedo decirte de lo que estoy más orgulloso: nuestro último disco, 'Wavering Radiant'.
Componer 'Wavering Radiant' fue una de las experiencias más intensas de mi vida. Siempre tratamos de mejorar con cada disco, de ir más lejos, a nuevos territorios y esto vino con una particular clase de presión que nos impactó a todos. Tuve mucha ansiedad e inseguridad componiendo WR que se compuso con una sensación en la que todos parecíamos llegar a un punto que parecía que nos superaba. Esto no es algo que hayamos hablado nunca juntos. La comunicación nunca fue nuestro punto fuerte. En lugar de ello, hablábamos entre nosotros a través de nuestros instrumentos. Al haber pasado tanto tiempo juntos, compartido tanto, instintivamente nos comunicábamos a través de nuestra música. Creo que todos sabíamos que este, seguramente, iba a ser nuestro último disco como banda aún no habiendo hablado nunca de ello y que nadie lo sugiriera. Era una sensación que teníamos en el fondo de mi mente y que creo que compartían el resto de chicos.
Anteriormente a WR, pasé unos años grabando y produciendo. Además de grabar nuestras demos y mezclar el set del DVD 'Clearing The Eye', también produje el 'Bird Of Prey' de Zozobra y el 'Spondaic Oblation' de Aloke Dutta.
Mientras componíamos WR, hice demos sin parar. Rehicimos las canciones muchas veces antes de llegar al punto en el que todos estuvimos de acuerdo en que estaban acabadas. Nunca antes habíamos ensayado tanto un disco en nuestra carrera. Estábamos en nuestro local trabajando cada día, de lunes a viernes, durante casi un año.
Para cuando estuvimos listos para grabar, yo me había convertido en una persona diferente. Este disco me consumió. No podía dormir porque las canciones se me repetían una y otra vez en mi cabeza. Escuchaba las demos, siempre cuestionándome si estaban realmente acabadas, si eran lo suficientemente buenas porque, ¿y si este era nuestro último disco? Cuando llegó el día de grabar la batería en Sound City, a las afueras de Los Angeles, estaba más preparado que lo había estado nunca antes.
Escogimos a Joe Barresi para que nos ayudara a crear este disco, lo cual fue una separación de nuestra habitual relación con Matt Bayles. Joe es responsable de algunos de nuestros discos favoritos de Melvins, Tool, Queens Of The Stone Age… Echando la vista atrás, grabar con Joe en Sound City, me hizo volver a sentirme como un niño que graba con su banda por primera vez. Un nuevo productor, una nueva manera de hacer las cosas, un técnico de batería (cosa que nunca antes había tenido), un estudio nuevo, una nueva batería, un nuevo set de canciones. Estábamos completamente preparados para hacer este disco. La grabación de la batería fue rápida – de hecho, terminé antes del tiempo que habíamos contratado. Y toda la ansiedad e inseguridad fue sustituída por confianza y fuerza.
Las siguientes semanas, mientras que los otros chicos hacían sus partes, absorbí lo máximo posible. Seguía habiendo una sensación amenazante de que era nuestra última vez juntos en el estudio y queríamos estar el máximo tiempo posible. Me encantó ver a Joe trabajando con los chicos y su método de ayudarnos a crear el disco, desde tomar pasos extra para lograr sonidos únicos para crear un ambiente que nos alentara a dar lo mejor de nosotros. Su oído es tan musical como técnico, que como batería, es algo con lo que me identifico. Ese mes me dejó claro que tras Isis iba a seguir trabajar de ingeniero y productor.
Más allá del rollo técnico, me encanta estar en un estudio y crear. Nada puede reemplazar lo que se siente cuando subes a un escenario, bajo los focos y tocar para un público como el que tenía Isis pero también siento una genuina conexión por ayudar a otras bandas a crear sus discos. No hay nada como ver una asombrosa actuación musical y estar ahí para capturarla. O, cuando todo empieza a juntarse y subes los altavoces; y la batería y el bajo te da en el pecho; y las guitarras y la voz te canta en la oreja. O cuando una banda te viene con su música, te pregunta si quieres unirte a ella para crear su álbum y te da confianza.
Estoy en un lugar donde estoy pasando el testigo a otras bandas – y eso es algo que nunca podría haber hecho sin la profundamente gratificante, la experiencia que me cambió la vida que tuve con Isis y la intensa experiencia de crear 'Wavering Radiant'.«