Chris Cornell ha departido con el tabloide The Sun sobre el regreso del grupo con nuevo álbum previsto para otoño. Lo cierto es que el vocalista considera que la actual situación del rock es la ideal para que vuelva a resurgir con fuerza.
“Siempre he creído que la música rock se beneficia de los obstáculos. El peor rock se hace cuando todo el mundo quiere el rock, como a finales de los ochenta. Esa fue la única vez en la que el rock ha sido el género musical más vendido – y la mayoría fue mierda. La escena e Seattle era la antítesis de aquello. Soundgarden fue un gran instrumento en crear ese cambio.
Fuimos una de las primeras bandas en ser analizadas, donde los ingenios del rock comercial pensaron, ‘Esto es el futuro. Esta banda o bandas como esta pueden vender millones de discos’. Una de las grandes razones por las que el rock se hizo tan grande tan rápido es porque a gente estaba harta de lo que había por entonces. Ahora pasa lo mismo. Ahora hay una mejor opción de que surja una escena rock saludable y vital porque hay algo contra lo que reaccionar. La música pop contemporánea no puede ser peor de lo que es ahora. El único brote verde fue Adele teniendo el disco más vendido del año pasado. Hay canciones de verdad y sabe cantar. Así que parece obvio que el gran mercado sigue respondiendo a un ser humano creando música.”
El vocalista recuerda que la publicación de su grandes éxitos, “Telephantasm”, sirvió para volver a poner de actualidad a la banda, al margen de sellos. “Hay una nueva generación de fans del rock que quizá no conozcan nuestra historia musical que les podría interesar. Nadie estaba haciendo eso. Decidimos que iba a ser bajo nuestra responsabilidad. Sacar el catálogo antiguo es la manera más barata que tienen los sellos para tener un lanzamiento en sus contabilidades – no les cuesta nada. Se dejan todos sus ingresos en el que sea el mayor disco de pop de ese trimestre. A ti te dejan muy poco.”
Pese a que siempre se pensó que su separación allá por 1997 fue debida a malos rollos internos pero según Cornell la cosa explotó por la excesiva presión a la que se vieron sometidos tras el éxito de “Superunknown” y el álbum posterior. “Para cuando salió ‘Down On The Upside’ y terminamos la gira de ese, sentimos que era momento de separarnos. Nos habíamos convertido en parte de un monstruo comercial y era ese escenario cíclico. Nos pedían que nos comprometiéramos a hacer giras para promocionar un álbum para el que ni habíamos compuesto una canción. Empezamos como banda indie en 1984 y terminamos en un sello discográfico gigantesco en una industria que tenía una forma de trabajar con la que ya no disfrutábamos.”
El nuevo álbum es “tan vital como cualquier cosa que hayamos hecho. No es de ninguna manera nostálgico, no es una vuelta atrás. Es nueva música disponible a una nueva audiencia de rock y lo máximo que podríamos haber logrado tratando de llegar a los fans del rock es darles algo que sea suyo.”
El paso de los años no ha cambiado demasiado su forma de componer. “En los noventa pasábamos muy poco tiempo preocupados sobre nuestro público y tratando de ver qué quería nuestro público. Siempre hacíamos una canción cada vez con los cuatro miembros de la banda contribuyendo, lo cual creaba muchas sensaciones diferentes. Nuestro nuevo álbum es lo mismo. Nunca hemos discutido qué clase de disco deberíamos hacer. Nunca lo hemos hecho.” Y el paso de los años no ha secado sus ideas. “(Cuando nos volvimos a juntar) fue como si nos hubiéramos tomado un pequeño descanso. Hay ese miedo por si el tiempo había cambiado nuestra habilidad para interactuar o ser creativos como unidad así que fue realmente emocionante ver que no había pasado. Tras todo este tiempo aún podemos hacer lo que hacemos sin esfuerzo.”
De lo que está orgulloso Cornell es que Songarden aún habiendo sido metidos en el saco del ‘grunge’ siempre han tenido un sonido muy diverso. “Lo que nos hizo destacar (del grunge) es que no éramos una banda que fuese fácil de pillar. Creo que cada banda de la escena de Seattle era bastante fácil de pillar. Pero nosotros éramos extremadamente diversos y lo hacíamos de forma auténtica, algo que no es fácil de hacer. Creo que lo que se ha pasado por alto es que cubrimos mucho territorio. En términos de aceptación comercial, eso te daña. Pero en términos de longevidad y tener un impacto que dure y que sea legítimamente importante culturalmente, te ayuda.”